ATENCIÓN | En Montecristi, abuelitos no pagarán los impuestos prediales, fueron exonerados en el 100%

María Aurora Mero llegó de la mano de su hijo Luis a cumplir con sus obligaciones tributarias el 7 de enero. Tiene 74 años y, asegura, siempre trata de contribuir con la ciudad en los primeros días del año.

Lo que no sabía es que, como pagó antes del 15 de enero, tuvo un 10 % de descuento en sus valores.

Pero eso no es todo, en Montecristi, las personas de la tercera edad están exentas del 100 % pago del impuesto predial y la tasa de limpieza de espacios públicos, y del 50 % en la Contribución Especial de Mejoras (CEM), siempre y cuando la persona sea dueña absoluta del predio.

Esto no significa que, cuando se acerque a cumplir con sus contribuciones, no tenga nada que abonar, puesto a que adicional al tributo predial existen las tasas de limpieza, de servicios tecnológico y la de seguridad, que no reflejan descuentos, pues está prohibido por la ley.

Si el predio está a nombre de personas adultas mayores, el impuesto predial se exonera al 100 %, siempre y cuando su patrimonio no exceda las 500 Remuneraciones Básicas Unificadas (RBU) -es decir $235 mil, si supera ese límite, pagará el tributo proporcional al excedente.

Este beneficio solo aplica a quienes son dueños totales del predio. Por ejemplo, si una vivienda es propiedad de un matrimonio en el cual uno de los dos no es adulto mayor, el descuento será proporcional.

No obstante, el GAD Montecristi es uno de los pocos municipios del país que extiende a tasas y contribución especial por mejoras este beneficio para usuarios mayores de 65 años.

«Eso sí, los adultos mayores y jubilados sin relación de dependencia laboral, cuyos ingresos provienen exclusivamente de pensiones jubilares, tienen derecho a un 50 % de descuento en la CEM. Nuestro objetivo es hacer que cumplir con tus obligaciones sea fácil y justo. Para más información, acércate al GAD Municipal o consulta en nuestro portal ciudadano», informó Xavier Vélez, del Gad Montecristi.

Mero resaltó la importancia de contribuir al desarrollo de Montecristi, mientras disfruta de sus derechos como adulta mayor.