Pobladores de la comunidad Resbalón, en el cantón Rocafuerte (Manabí), se opusieron a que un habitante de esa localidad y quien ejerce sus funciones de policía en otra comunidad llegue a su casa para cumplir la cuarentena, pues era sospechoso de estar contagiado de COVID-19.
Patricio Zambrano, alcalde de Rocafuerte, confirmó que este miércoles, pobladores de Resbalón ejercieron presión para que el policía cumpla la cuarentena en la comunidad donde prestaba sus servicios.
“Hay un protocolo a nivel nacional que justamente es para el caso de los policías, si un policía por ejemplo trabaja en Santo Domingo y tiene sospecha de estar infectado, la cuarentena tiene que guardarla en el cuartel de Santo Domingo. Si fuera el caso de un policía de Rocafuerte que tiene sospecha, aunque él sea de La Concordia, él está trabajando acá y tiene que pasar su cuarentena en el cuartel de Rocafuerte”, señaló Zambrano.
El alcalde manabita indicó que habitantes de comunidades rurales de Rocafuerte ejercen controles de acceso a sus comunidades e impiden que pobladores de otros sectores lleguen. Así sucede en sitios como Ojo de Agua, San Roque, Danzarín, El Cardón, Las Flores y otros.
“Tienen controles en las vías, ingresan solamente los carros que son de esas zonas y de acuerdo a lo que estipula el decreto y eso nos da mayor seguridad en esos lugares”, indicó Zambrano.
Hasta este jueves, Rocafuerte no registraba casos positivos de coronavirus. (El Universo)