Un grupo de 207 niños soldados ha sido liberado en Sudán del Sur en virtud de un acuerdo alcanzado con la mediación de Unicef, informó hoy este organismo internacional.
Los menores, 112 niños y 95 niñas, fueron puestos en libertad este martes por grupos armados progubernamentales y rebeldes en la comunidad rural de Bakiwiri, en el estado de Ecuatoria Occidental, en el suroeste del país, indicó la organización en un comunicado de Unicef.
Esta es la segunda tanda de niños soldados puestos en libertad en lo que va de año, después de otro grupo de unos 300 niños liberados el pasado febrero en la ciudad de Yambio, en la misma región.
Unicef espera que en los próximos meses se llegue a poner en libertad a un total de 1.000 niños, en el marco de este programa que prevé la reinserción de los menores en la sociedad.
«Ningún niño debería tener que tomar un arma ni combatir», dijo el representante de Unicef en el país, Mahimbo Mdoe.
Durante la ceremonia de liberación, los niños fueron formalmente desarmados y provistos de ropas civiles.
Próximamente, está previsto que se lleven a cabo exámenes médicos y reciban asesoramiento y apoyo psicosocial como parte del programa de reintegración, que implementa Unicef y sus socios.
Cuando los niños regresen a sus hogares, se proporcionará a sus familias tres meses de asistencia alimentaria para apoyar su reintegración inicial.
A los niños también se les dará una formación profesional destinada a mejorar los ingresos familiares y la seguridad alimentaria, a fin de evitar que vuelvan a ser captados por grupos armados.
Unicef calcula que todavía hay unos 19.000 niños soldados en Sudán del Sur, tanto en grupos favorables a las autoridades como en los insurgentes.
Asimismo, la oficina de Unicef en Sudán del Sur indicó que necesitará de 45 millones de dólares en los próximos tres años para apoyar la liberación, la desmovilización y la reintegración de estos 19.000 niños. EFE