La Alianza para el Mapeo y Monitoreo de Feminicidios en Ecuador denunció que la violencia machista sigue arrebatando la vida de las mujeres, sin que el Estado asuma su responsabilidad de garantizar la integridad y proteger la vida de niñas, adolescentes y mujeres con acciones reales y concretas.
En Ecuador fueron 748 las mujeres asesinadas por razones de género, desde el 1ero de enero del 2014 hasta el 2 de marzo de 2020. 72 de los casos se registraron en Manabí, convirtiéndose esta provincia en una de las cuatro del país donde más muertes por femicidios se registraron, según el cuadro anterior.
Son 18 las vidas perdidas solamente en lo que va de este año.
Según las estadísticas, los meses más peligrosos para las mujeres son enero, marzo, septiembre y diciembre. Desde el 2014, la tendencia se mantiene: un femicidio cada 3 días.
En la mayoría de los casos, los femicidios tienen antecedentes en una cadena de hechos de violencia. Los datos disponibles nos dicen que al menos 56 mujeres fueron abusadas sexualmente antes de ser asesinadas y 50 mujeres fueron desaparecidas. Sabemos que al menos 13 de las víctimas de femicidio estaban embarazadas cuando fueron asesinadas.
Si se analizan los datos sobre segmentos etéreos, se evidencia que la extrema violencia de género se reproduce y se naturaliza durante todo el ciclo vital de las mujeres, desde temprana edad hasta la edad adulta.
El 64% de las víctimas de femicidio, es decir 478 casos, eran mujeres en su edad reproductiva, entre 19 y 39 años. Los datos nos dicen, además, que las mujeres jóvenes son las que corren mayores riesgos. La edad más frecuente de las víctimas (moda) está comprendida entre 21 y 23 años, es decir eran mujeres en su juventud plena, posiblemente en sus primeras relaciones sentimentales.
Las profundas secuelas en los hijos e hijas
Más del 60% de las mujeres asesinadas eran madres de familia. Según nuestros datos, al menos 999 hijos e hijas quedaron en situación de orfandad y en una situación de desamparo familiar. Eso suma víctimas invisibles, quienes sufrirán las consecuencias del crimen contra su madre, del cual en algunas ocasiones llegan a ser testigos.
Violencia extrema
Hablamos de crímenes brutales porque, en todos los casos, los asesinatos de las mujeres tuvieron características extremadamente violentas que mostraron saña y odio. En el 39% de los casos, la víctimas fueron apuñaladas, el 13% fue matada a golpes. El 13% de las mujeres fue asesinada con armas de fuego, el 8% estranguladas, asfixiadas (6%), ahorcadas (5%) y quemadas (3%).
Alianza para el Monitoreo y Mapeo de los Femicidios en Ecuador
El mapa fue realizado en Ecuador por las organizaciones de la sociedad civil: Fundación ALDEA, Red Nacional de Casas de Acogida, Taller de Comunicación Mujer, Comisión Ecuménica de Derechos Humanos CEDHU, Movimiento de Mujeres de El Oro y Movimiento de Mujeres La Merced.
El objetivo de este mapeo fue mostrar esta realidad y cómo se expresa en los territorios.