El ministro del Interior, John Reimberg, aseguró este domingo 27 de julio que los 1 000 presos colombianos que están siendo deportados a su país y que cumplían penas en distintas cárceles, tienen «prohibido su ingreso al Ecuador por los próximos 40 años».
«No vamos a permitir que el terror cruce nuestras fronteras ni que se instale en nuestras calles», escribió Reimberg en su cuenta de la red social X después de que el viernes el Gobierno empezara con la repatriación de los primeros 700 reos, una medida que Colombia denunció que se ha realizado de manera «unilateral» e «inamistosa».
«Esta acción forma parte de nuestra política de tolerancia cero con el crimen organizado. Quienes atenten contra la seguridad del país, no tienen cabida aquí», añadió.
Según el ministro, los extranjeros estaban finalizando su tiempo en prisión tras haber sido capturados por robo, receptación, tráfico de drogas y delitos contra la propiedad, aunque dos deportados aseguraron a EFE el viernes que habían estado poco tiempo en la cárcel, uno llevaba dos de los diez años a los que lo sentenciaron y otro un poco más de un año, de los más de tres que debía cumplir.
«Seguiremos firmes. La seguridad de los ecuatorianos está por encima de todo, añadió Reimberg este domingo.