El Tribunal Constitucional de Zimbabue confirmó la victoria del presidente Emmerson Mnangagwa en las elecciones generales celebradas el 30 de julio, desestimando la demanda de la oposición que había retrasado la toma de posesión.
En un fallo unánime de los nueve jueces del máximo tribunal del país, el Jefe de Justicia, Luke Malaba, dijo que el líder de la oposición, Nelson Chamisa, no había podido probar las acusaciones de amaño durante las votaciones presidenciales.
“Emmerson Dambudzo Mnangagwa es declarado vencedor legítimo de las elecciones generales celebradas el 30 de julio de 2018”, dijo Malaba en su sentencia.
Las elecciones, en las que se enfrentaron Mnangagwa y Chamisa como principales candidatos, fue contemplada como un paso fundamental hacia la recuperación económica y la reparación de la mala reputación del país pero, en cambio, dejó a la nación profundamente dividida.
La dura respuesta del ejército a la violencia postelectoral dejó seis muertos el 1 de agosto, recordando a las severas tácticas de seguridad de Robert Mugabe, expulsado del poder por un golpe de estado en noviembre tras 37 años de mandato.
Mnangagwa se enfrenta ahora al desafío de convencer a la comunidad internacional de que la respuesta del ejército y los errores ocurridos en el proceso electoral no descarrilarán sus prometidas reformas, centradas en la recuperación económica.
La policía bloqueó carreteras que rodeaban el tribunal, un edificio del siglo XIX de estilo colonial británico localizado justo frente a las oficinas de Mnangagwa, en el centro de Harare.
Vehículos que transportaban cañones de agua reaparecieron en las calles cercanas al tribunal mientras la policía antidisturbios patrullaba el centro de la ciudad por grupos. (Reuters)