El hallazgo de la tonelada y 45 kilos de clorhidrato de cocaína este último martes, en el puerto marítimo de Guayaquil, se logró tras un estudio de perfiles de las cargas de exportación realizado por agentes de la Unidad de Información de Puertos y Aeropuertos (UIPA), lo cual permitió la intervención del Centro Regional de Adiestramiento Canino (CRAC).
Así lo manifestó el general Pablo Aguirre, director nacional Antinarcóticos, quien precisó que el alijo está valorado en $52’000.000.
Durante el operativo, los canes confirmaron la presencia de cocaína entre una carga de merluza congelada en el interior del contenedor SEGU9533566 de la empresa Procopromar de Manta y que tenía como supuesto destino en Bélgica a la compañía Ahlanfruits.
«Hemos impedido que lleguen a los mercados de Europa, 10’400.000 dosis», dijo el jefe antidrogas.
El coronel Edwin Noguera, jefe de la Unidad Antinarcóticos de la zona 8, detalló que en el frustrado envío de la carga ilegal estarían involucradas tres redes de narcotráfico internacional. Un toro, una motosierra y el rostro del presidente de Rusia, Vladimir Putin, estaban en los bloques.
Además, los investigadores policiales analizan la nueva cinta de embalaje usada para envolver la cocaína, porque su textura es muy gruesa y, al parecer, estaría compuesta de una sustancia para impedir que la droga sea detectada por los perros antinarcóticos. Las investigaciones también permitieron la captura del agente afianzado de aduanas que realizó todos los trámites para la exportación de la carga de pescado donde se encontró la droga. (El Telégrafo)