La alerta se registró cerca de las 05:00 de este sábado. Un hombre estaba sin signos vitales sobre una vereda en el bloque 10 de Bastión Popular, en el norte de Guayaquil.
El hallazgo lo realizó una joven que acudía a un culto evangélico cerca de la zona. Al presenciar al hombre acostado y sin reacción, llamó a varios vecinos y luego alertaron el hecho a la Policía Nacional.
El occiso vestía una camisa azul, un pantalón jean y estaba sin zapatos. Una vez en el sitio, los uniformados confirmaron el deceso del hombre, quien presuntamente habría sido escopolaminado.
Según versiones preliminares, la víctima estaba siendo trasladada en un vehículo y fue abandonada durante la madrugada del sábado en la vereda.
Moradores del sector indicaron que hechos similares no se registraban allí desde hace varios años. Ellos quedaron alarmados, pues temen que este tipo de casos se incrementen.
En el momento del hallazgo, la víctima no poseía documentos ni objetos personales por lo cual la Policía Nacional no pudo identificarlo hasta las 15:00 de este sábado.
Aproximadamente a las 08:00 se realizó el levantamiento del cadáver, que fue trasladado hacia el Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses para que se le practique la respectiva autopsia.
Antes, el occiso fue tapado con una manta blanca, mientras los uniformados recababan datos en la zona.
Según especialistas de centros de salud, durante quincena y fin de mes se registran los picos más altos de casos de personas que llegan por asistencia médica tras haber sido drogados con escopolamina u otras sustancias.
Expertos en seguridad indican que quienes cometen este tipo de delitos aprovechan lugares como discotecas o bares para conseguir víctimas y robarles a través del uso de la escopolamina. (El Universo)