Una mujer de 61 años de Nebraska (EE UU), Cecile Eledge, dio a luz a la pequeña Uma, la bebé de su hijo Matthew, que ahora ya podrá cumplir su sueño de formar una familia junto a su pareja Elliot Dougherty.
La mujer se sometió a una fecundación in vitro con el esperma de su hijo, de 32 años, y los óvulos que voluntariamente ofreció la hermana de su yerno, Lea Yribe, según publica Buzzfeed.
A pesar de su edad, la mujer pasó todos los controlos médicos previos y demostró estar en plena forma, de hecho, se quedó embarazada al primer intento de fecundación.
Cecile, que siempre ha llevado unos hábitos de vida saludable, se ofreció a ayudar a su hijo y lo que en un principio sonaba como una broma, finalmente los médicos dieron el visto bueno y el pasado 25 de marzo nació Uma, la que sería su tercera hija y su primera nieta, una bebé sana de 2,260 kilos de peso.
La familia ha querido hacer pública su historia, ilustrada por la fotógrafa Ariel Panowicz, para demostrar que estas historias son posibles hasta en un estado tan conservador como el de Nebraska, en el corazón de EE UU, donde Matthew fue despedido en 2015 de su puesto como profesor de inglés en un instituto católico de Omaha tras informar que se iba a casar con un hombre.
Cecile no es la primera abuela que se ha prestado a gestar a su propia nieta. En 1987, una sudafricana de 48 años dio a luz a los trillizos de su hija. En 1996, un británica de 51 gestó y parió a su nieto para ayudar a su hija y yerno a ser padres. En 2016, una mujer griega se convirtió en la mujer de mayor edad (67 años) en gestar a su nieto, en este caso para ayudar a su hija.