Una extraordinaria crecida del río Paraguay por efecto de copiosas lluvias ha dejado damnificadas a más de 20.000 familias en menos de dos semanas y la municipalidad de Asunción declaró emergencia por 90 días.
“Hasta la fecha suman 20.404 las familias afectadas por las intensas lluvias registradas en el mes de marzo en todo el país, de las cuales 16.365 ya fueron atendidas por la institución, es decir el 80%”, dijo el ministro de Emergencia Nacional, Joaquín Roa, en rueda de prensa.
La declaración de emergencia en Asunción, la ciudad más golpeada por el fenómeno, permitirá a la alcaldía facilitar la ayuda a los afectados y al gobierno activar sus organizaciones de defensa y asistencia civil.
Se estima que unas 5.000 familias pertenecientes al cinturón pobre de la capital están afectadas. “Los inundados necesitan chapas, maderas y todo tipo de ayuda”, expresó un funcionario municipal a la AFP tras inspeccionar parte del Bañado Sur, zona baja de Asunción donde viven en forma precaria unas 7 000 familias.
El río Paraguay recorre el país unos 1.000 km antes de desembocar en el río Paraná en Argentina.
“No esperábamos que subiera tan rápido. Hace un mes que volví a mi vivienda después de la última inundación”, dijo a la AFP Pedro Ramírez, poblador del barrio Santa Ana de Bañado Sur.
“No somos técnicos, pero el jueves pasado ya sabíamos que esto (la crecida) no iba a parar. Pese al urgente pedido de camiones, la Secretaría de Emergencia Nacional no se movilizó”, criticó el padre Pedro Velasco, sacerdote líder en Bañado Sur.
“Recién se movieron el lunes, pero ya fue tarde porque los vehículos ya no pudieron entrar. Se avisó a tiempo y no reaccionaron”, se lamentó.
El ministro Roa aseguró que la institución lleva entregados unos 400 000 kilos de alimentos en trabajo coordinado con las Fuerzas Armadas. (El Comercio)