En el escenario de la Star Wars Celebration 2019, en el Wintrust Arena de Chicago, J. J. Abrams da paso al tráiler del Episodio IX. Es el momento en el que se desvelarán los datos de la próxima película, algunos momentos cumbre y, sobre todo, una cuestión fundamental: el título, siempre celosamente oculto.
En el escenario, la presencia de Anthony Daniels, Daisy Ridley, Oscar Isaac, Kathleen Kennedy, John Boyega y Kelly Marie Tran enloquece a los fans. Cualquier gesto o comentario despierta gritos de emoción, pero se lleva la palma la presencia de Billy Dee Williams, que volverá a interpretar a Lando Calrissian, aquel viejo amigo de Han Solo. R2-D2 y un nuevo androide que despierta un grito de ternura entre el público flanquean a las estrellas.
Justo antes del momento clave, la masa de fans que llena el Wintrust Arena ruge. Después, todos callan de golpe. El mismo furor que vuelcan en jalear la aparición de su personaje favorito lo ponen en conseguir un silencio sepulcral. Han Solos, Lukes, Reys, cinco bebés vestidos de Yoda, tropecientas Leias y un fan que ha venido desde Louisiana y ahora suda de calor y emoción bajo su disfraz de Chewbacca alzan sus rostros hacia la pantalla, como esperando recibir la comunión con la Fuerza. «Let’s play!», grita un fan, desesperado, en la oscuridad. Risas generalizadas. Y entonces comienza.
Al principio solo se escucha la respiración entrecortada de Rey, que se muestra fiera y atenta, al acecho, con el sable de luz de Luke Skywalker (“¿La espada de su padre?”, especulan, dudando, unas fans). En el horizonte aparece la nave Tie, a la que Rey regatea en el aire en un movimiento admirable, mostrando, para regocijo del público, que ya domina la Fuerza. Y a partir de entonces las imágenes se suceden entre un estremecimiento generalizado.
Cada momento tienen su grito, su suspiro exacto, su lamento: cuando Rey y Leia se abrazan, se oye casi un sollozo, una especie de oleada de corazones rotos por la muerte en diciembre de 2017 de Carrie Fisher, y, en realidad, por la desaparición de toda una generación de personajes. Durante la charla previa, se ha revelado que las imágenes de Carrie Fisher proceden del metraje no usado de la película anterior. Cuando aparece en pantalla el título, las gradas tiemblan: “The Rise of Skywalker”, el ascenso de la Fuerza jedi, la continuación del espíritu incansable que lucha contra el Lado Oscuro. Esta fiesta no termina.
El tráiler de The Rise of Skywalker, que se estrenará el 20 de diciembre, apunta claramente en una dirección: de alguna forma, se da fin a una generación de actores / personajes para que la saga continúe su camino. Star Wars está viva, mantiene el pulso. La Fuerza ha sido transmitida, y, claramente, es Rey la que porta el testigo.
Desde el principio del evento, la mirada ha estado puesta en el papel de las mujeres en Star Wars, y lo cierto es que por todas partes se ven niñas vestidas de Rey y Leia. Ahora la saga continúa en una lucha que nunca termina, pero que, precisamente porque nunca lo hace, permite que la nostalgia, tan importante en esta clase de eventos, dé paso a una nueva fuerza, que claramente mira hacia el futuro y parece girar alrededor de Rey.
Entre el público, una niña de unos 4 años disfrazada de la gran jedi agita su espada láser. “Toda generación tiene su leyenda”, dice el tráiler. Parece que, en esta nueva generación, queda claro hacia dónde apunta esta leyenda.