Josep Maria Llop, director de cátedra de ciudades intermedias de la UNESCO, avizora que si Portoviejo sufrió los efectos del terremoto del 16 A de un modo intenso y ha respondido, reaccionado y readaptado a varias de sus situaciones es una ciudad resiliente, y como tal puede volver a tener o mejorar su infraestructura y su situación.
El catedrático de la universidad de Lleida, fue parte del laboratorio de planificación territorial para la resiliencia, desarrollado durante estos dos días en Portoviejo, como parte del programa ciudades intermedias sostenibles que se lleva adelante en el marco de una alianza entre el GAD municipal, la Cooperación Alemana GIZ y la UNESCO.
Para Llop, esta ciudad (Portoviejo) tiene la oportunidad de convertirse en ejemplo para el resto de ciudades del país y para 1.156 ciudades similares en toda América Latina, esto es mediante la formalización del plan urbano según las líneas que marca la Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial y Gestión de Uso de Suelo.
Dijo que su participación en este programa como director de cátedra de la Unesco es de acompañamiento e informará de los resultados a dos instituciones de índole internacional, como son la UNESCO y la Asociación Mundial de Ciudadades (United Cities Local Governance).
PLAN URBANO
Rosa Fernández, subdirectora cantonal de Planificación urbanística y ordenamiento territorial, indicó que a partir de este primer taller se prevé para octubre próximo, tener una primera propuesta del plan urbano de uso y gestión de suelo, que posicionará a la ciudad en el ámbito internacional. “Esta propuesta será socializada en octubre, en un foro internacional”, precisó.
“El plan urbano será un instrumento muy importante para la institucionalización del modelo de gestión que está institución municipal ha implantado para la transformación urbana resiliente”, explicó.Fernández dijo que ha sido una primera experiencia de trabajo conjunto entre la academia a través del Instituto de I
nvestigación de la UTM y técnicos y directores municipales, con la finalidad de institucionalizar los objetivos contenidos en el modelo de gestión que marcarán el desarrollo de Portoviejo a 35 años.