El expresidente boliviano Evo Morales dijo ayer que si vuelve a su país formaría “milicias armadas del pueblo” como en Venezuela, al evocar su renuncia en noviembre tras perder el apoyo de militares y policías ante denuncias de fraude electoral.
En un contacto desde Argentina, donde actualmente reside, con la Radio Kawsachum Coca (RKC), de propiedad del sindicato cocalero al que pertenece, Morales dijo que “de acá a poco tiempo, si volvería, hay que organizar como Venezuela milicias armadas del pueblo”.
Morales consideró “un error garrafal” no haber tenido “un plan B” para defender su gobierno, que se desmoronó tras un motín policial y la declaración pública del mando de las Fuerzas Armadas para que declinara el cargo que ostentó durante casi 14 años.
“¿Por qué este golpe de Estado? Entre los movimientos sociales y el Gobierno (que presidía) mucho nos hemos confiado”, sostuvo.
Imprudencia
Las declaraciones de Morales, sobre quien pesa una orden de detención emitida por la fiscalía de Bolivia tras una denuncia por sedición y terrorismo, podrían agravar su caso, dijo Israel Alanoca, viceministro del gobierno de Jeanine Áñez, que se proclamó al frente del Ejecutivo boliviano.
“Ya existe un proceso en curso y un mandamiento de aprehensión por los delitos de sedición, terrorismo y financiamiento al terrorismo en contra de Morales, lo que haga se sumará al proceso y puede haber incluso agravantes”, dijo Alanoca, viceministro de Coordinación Gubernamental.
Su principal rival en las elecciones de octubre, el expresidente Carlos Mesa tuiteó que Morales “primero quiso cercar las ciudades y ahora sugiere armar grupos irregulares y violentos para enfrentar a los bolivianos y a las FF.AA.”
Mesa hacía referencia a la acusación del gobierno de Áñez sobre un audio que le atribuye a Morales, donde una voz instruye a un dirigente cocalero a sitiar las ciudades y cortar el suministro de comida. “Estas amenazas recurrentes muestran las verdaderos intenciones” de Morales, dijo Mesa.
Contexto
En Venezuela, unos 3,2 millones de civiles integran la Milicia, un cuerpo anexado a la Fuerza Armada creado por el fallecido mandatario Hugo Chávez, fuerte aliado de Morales y padre político del actual presidente Nicolás Maduro.
Tras dimitir el 10 de noviembre, Morales se refugió en México y hace un mes en Argentina. Un gobierno provisional encabezado por Jeanine Áñez tomó su lugar para llamar a nuevas elecciones.