La empresa, Aguas de Manta, puso fin a un grave problema sanitario que por años existió en el tramo de la avenida 13 entre calles 9 y 10, originado por constantes reboses de aguas servidas.
La solución se logró cambiando 60 metros lineales del antiguo y obstruido sistema de alcantarillado de cemento, por una tubería de PVC de 400mm y la reconstrucción en hormigón del pozo central de revisión.
Conny Reyes, moradora beneficiada de la obra, dijo sentirse agradecida por la solución ya que, recordó, su familia vivió momentos difíciles con los reboses en plena pandemia. “Ahora ya podemos dormir tranquilos”, agregó.
Vanessa Zambrano, otra habitante, también expresó la alegría de contar con un sistema sanitario renovado, pues las aguas servidas rebosaron varias veces en la sala y los baños de su vivienda. (Boletín)