Con un clima agradable y con grandes extensiones de playa y mar, variedad de exquisitos platos típicos, rutas de paseo en bicicleta de montaña, caminatas por el refugio de vida silvestre y marina, todos estos atractivo posee la provincia de Manabí, la cual, espera recibir en este próximo feriado a los turistas nacionales y extranjeros, para pasar una experiencia inolvidable en cada rincón de esta maravillosa provincia.
Da la sensación de que Manabí es como un rompecabezas, porque cada ciudad que pertenece a esta provincia tiene algo en particular para ofrecer a sus visitantes.
La capital manabita, Portoviejo, posee parques en donde se puede observar áreas verdes, zonas de sana diversión. Uno de ellos es el parque Las Vegas que tiene una extensión de 10,7 hectáreas y cuenta con espacios naturales, deportivos y culturales. Además, en los años 60 fue escenario para la presentación de grandes artistas y orquestas reconocidas a nivel mundial.
Otro de los parque es La Rotonda, con una extensión 15,20 hectáreas; en este lugar se pueden puede realizar diversas actividades, tales como: ciclosrrutas, visitar las lagunas artificiales con canales que se pueden recorrer en botes. Además se puede apreciar un túnel de agua y una pantalla de agua de 15 metros de altura.
Otro de los atractivos que nos ofrece la capital de los manabitas es La Tomatera, un bosque ubicado a pocos minutos de la ciudad, que tiene una extensión de mil km en donde se realiza ciclismo de montaña. Durante su trayecto, los ciclistas podrán apreciar un bosque seco, donde habitan especies de flora y fauna endémicas, en medio de las típicas casas de los campesinos.
A 15 minutos de Portoviejo se encuentra la parroquia de Picoazá en donde se encuentra el complejo arqueológico Cerro Hojas Jaboncillo, que posee una extensión de 3.500 hectáreas; en este lugar los turistas tiene la oportunidad de observar más de 900 estructuras que evidencian la formación estatal Manteña (900-1533 d.c.). Cabe señalar, que uno de los símbolos más singulares de la Ciudad de los Cerros, son las estelas y sillas talladas en piedra en forma de “U”.
Otro de los atractivos turísticos de Portoviejo es la playa Crucita, que se encuentra a 20 minutos de la capital manabita, y una de las características de este lugar es que se practica el parapente. (Foto Carlos Granja Medranda)
Turismo con parapente
En otra dirección, a 20 minutos de la ‘ciudad de los Reales Tamarindo, como también se conoce a Portoviejo, se encuentra el balneario Crucita muy conocido por los aficionados al vuelo libre en parapente. Y si ustedes deciden ir a esta maravillosa playa, pueden preguntar por Gregorio Cevallos quien por 23 años viene practicando el parapente, e invita a experimentar esa sensación de volar, en donde las personas se olvidan de todos los problemas de la tierra; el valor de esta experiencia es de $ 35 por 20 minutos.
Manta y sus alrededores
Manta es otra de las ciudades manabitas que se caracteriza por tener gente amable y hospitalaria, por tal motivo, es visitada por turistas nacionales y extranjeros, ya que, en sus principales playas, Murciélago y Tarqui Playita Mía, los visitantes no solo disfrutan del mar y la arena, sino que, también degustan los diferentes platos de mariscos, como: el camotillo, arroz marinero, la cazuela marinera, bolones y tigrillos.
A 30 minutos de Manta se encuentra el refugio de vida silvestre Pacoche. (Foto Carlos Granja Medranda)
Pero Manta no solo es mar y arena, porque a 30 minutos se encuentra El Refugio de Vida Silvestre Marino y Costero de Pacoche donde los visitantes tienen la oportunidad de caminar por los senderos del “El Pasaje del Mono” que recibe ese nombre por la presencia del mono aullador.
Esta reserva protegida tiene aproximadamente 5.045 hectáreas de ecosistema terrestre y 8.500 hectáreas de ambiente marino costero, es decir, existe una combinación ideal entre tierra y mar. El acceso es gratuito, pero la visita se realiza bajo la supervisión de un guía turístico por las condiciones internas del bosque.
En esta misma ruta, se encuentra el Faro de San Lorenzo, con 800 escalones que permitirán llegar y vivir una magnífica experiencia con vista al mar para poder divisar un paisaje único del Ecuador continental.
Bahía de Caráquez
Finalmente llegamos a Bahía de Caráquez, en donde encontramos un malecón totalmente regenerado, ya que sufrió muchos daños en el terremoto del 2016.
En esta ciudad costanera, los turistas pueden disfrutar de un paseo marítimo en donde se visita la Isla del Sol, la Isla Corazón, y además se puede deleitarse observando los manglares; Rojo, Negro y Blanco. En este paseo marítimo, los visitantes podrán mirar fragatas, pelícanos y cormoranes.
San Jacinto se encuentra a 20 minutos de Bahía de Caráquez; este balneario posee una extensa playa en que su gente se dedica a la pesca artesanal. Uno de sus lugares más visitados es el Manglar de La Boca, que tiene una extensión de 50 hectáreas y cuenta con una temperatura promedio de 24 a 28 grados.
San Jacinto es uno de los balnearios más visitados, en especial el sector de La Boca en donde el manglar es parte de su atractivo turistico. (Foto Carlos Granja Medranda)
Los habitantes de este sector lo llaman La Boca porque es el encuentro entre el río Portoviejo y el mar, lo que permite al visitate disfrutar al mismo tiempo del paso de las aguas saladas del mar y las aguas dulce del río.
Dice la letra del pasillo a Manabí, “Tierra bella cual ninguna, Cual ninguna hospitalaria”, y es en esta frase en donde se resume la característica de los manabitas, que esperan la visita de todos los ecuatorianos para este noviembre. El Universo