Hasta el mediodía de ayer, Frank Olivares, propietario de una funeraria junto al hospital Luis Vernaza de Guayaquil, había vendido ya tres cofres, cuando generalmente vende uno o ninguno durante el día. Una situación que ya empieza a preocuparlo, pues a diferencia de lo que señalan las cifras que cada día emite el Ministerio de Salud, se viene registrando un alza desde el inicio de este 2021.
“Estamos pensando en cerrar el negocio y no arriesgarnos como antes. Perdimos a dos compañeros por trabajar en los momentos más duros y no vamos a dejar que nos vuelva a suceder”, lamenta desde la entrada a su local.
Con un poco de nervios, el comerciante de servicios exequiales cuenta a este Diario que están volviendo a vivir momentos de angustia, tal como sucedió al inicio de la pandemia. “En los hospitales han vuelto a poner neumonía viral en los certificados en lugar de COVID, por eso es que estos fallecidos no se cuentan en las cifras que da el Gobierno. Pero desde que nos ponen neumonía, ya sabemos lo que está viviendo el país”, relata.
Y esa no es la única “prueba” que tiene para comparar las situaciones. Su teléfono ha vuelto a sonar más seguido y ya le tocan la puerta, otra vez, durante la madrugada. “Ayer (lunes) saqué a tres fallecidos del (Luis) Vernaza y me encontré con la novedad de que mis trabajadores ya tenían que meterse de nuevo al contenedor. Yo no puedo exponerme de esa manera”, reiteró.
Al igual que Olivares, otros dueños de funerarias de Guayaquil aseguran estar registrando un alza de fallecidos, en su mayoría por COVID-19, que salen de todos los hospitales, los cuales, reiteran, “están colapsados”, tal y como ha venido contando EXPRESO en las últimas semanas.
El presidente de la Federación de organizaciones de Servicios Exequiales del Ecuador, Merwin Terán, cuenta que la situación viene empeorando desde, aproximadamente, la segunda semana de diciembre.
“Yo vendía un promedio de ocho servicios mensuales, con la pandemia pasé a seis diarios. Esa cifra fue bajando hasta casi igualar la del inicio, pero ahora tengo un promedio de cuatro servicios semanales, que es el doble”, dice.
El líder gremial asegura que esa estadística tampoco muestra la realidad de los fallecidos, ya que muchos cuerpos son enterrados por “funerarias informales” que se han instalado en los exteriores de los hospitales desde el inicio de la pandemia.
Estos testimonios se alejan de lo que muestran las cifras del Ministerio de Salud, que entre el sábado y martes solo registró 19 fallecidos por coronavirus a nivel nacional, mientras que el Registro Civil ha contabilizado, solo en Guayas, 10 muertes diarias por encima del promedio.
A Orly Valero, de la funeraria Terán Jiménez, también le aterra que “vuelva lo de marzo”. En su local ya han registrado un alza de, al menos, 20 casos en el último mes. “Veníamos teniendo 60 fallecidos por mes, ahora hay unos 90. Imagínese si las demás funerarias están en la misma situación, quiere decir que el aumento de fallecidos es alto”, afirma.
Sus compañeros también se muestran preocupados ante las preguntas de este Diario. Uno de ellos, quien se encarga de embalar los cadáveres de la funeraria, asegura que “ahora están muriendo más personas jóvenes”, pues en las últimas semanas ha recogido los cuerpos de personas que no pasan de los 40 años.
La sensación de Valero y de sus compañeros es compartida por Richar Morales, dueño de la funeraria Solidaria, quien recibe un sinnúmero de llamadas mientras intenta explicar su situación. “De marzo para acá mi vida es desastrosa. En estos últimos meses he tenido un caso diario y ahora tengo tres. Hoy, por ejemplo, ya llevo cuatro y estoy esperando dos más. Todo esto que está sucediendo empezó como la vez pasada, esperemos que no aumente de la misma manera”. (Expreso)