Después del terremoto del 16 de abril de 2016, las obras de reconstrucción en Esmeraldas y Manabí han ido a paso lento, con poca efectividad, mucha burocracia y sin transparencia.
En más de cinco años, ya son tres Gobiernos los que han asumido responsabilidades al respecto, pero todavía hay hospitales a medias, o que no inicia su construcción; lo mismo sucede con carreteras, infraestructura pesquera, viviendas, entre otros elementos.
Según un reporte del actual secretario de la Unidad de Reconstrucción, Luis Miranda, solo se han concluido obras y adquisiciones por $271,53 millones; pero el presupuesto asignado para recuperar a las dos provincias asciende a $2.964,95 millones.
En otras palabras, se ha ejecutado menos de 10% desde 2016, lo que representa $54 millones en cada uno de los cinco años pasados desde la tragedia.
Todavía hay contratos y obras en ejecución por $2.476,22 millones y otros $217,20 que no pasan del papel a la acción.
Entre los hospitales inclusos están los de Manta, Bahía, Pedernales y Quinindé. En el caso del último, los trabajos iniciaron en 2020
Asimismo, no se ha avanzado en la construcción de infraestructura policial y de bomberos en más de una decena de ciudades de las dos provincias; y hay vías con escasos avances como la Quinindé- Las golondrinas.
Miranda reconoció que los informes trimestrales sobre el avance de la reconstrucción no se han presentado desde el anterior Gobierno. Sin embargo, se aseguró que se está preparando un análisis detallado de cómo se encontró a la unidad de ejecución con el cambio de administración.
Las autoridades aseguraron que las cosas se han venido manejando con mucho desorden, poca claridad y hasta corrupción. Incluso, todavía no se ha podido solucionar el problema con alrededor de 5.000 beneficiarios de viviendas que nunca recibieron lo ofrecido.
Durante una comparecencia ante la Comisión de Gobiernos Autónomos de la Asamblea, Marcelo Cabrera, ministro de Transporte y Obras Públicas, rechazó que se acuse de indolente. De acuerdo al funcionario, en casi 5 meses de gestión se ha trabajo en ordenar todos los procesos y evitar que haya más retrasos
«Indolentes son aquellos que, en lugar de dedicar los recursos a obras de fundamental importancia como agua potable o alcantarillado, permitieron que se hagan parques y otras obras suntuarias. Se debe aclarar las actividad del anterior secretario de la Reconstrucción, el cual está ahora prófugo», acotó. (JS/La Hora)