Ecuador, cuarto país latino con intentos de ataque cibernético por minuto

El Comercio.- El colombiano Felipe Gómez dice que en el 2022 Ecuador tuvo 84 intentos de infección por virus cada minuto. Es el cuarto país en el ranking de un estudio, donde Brasil ocupa el primero, le siguen México y Perú.

Este experto, quien es director regional de Fluid Attacks, dio esas cifras en la Sextas Jornadas de Seguridad Bancaria, que se desarrollan este jueves 22 y viernes 23 de junio del 2023 en Quito. La Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca) y su Comité de Seguridad Bancaria organizaron esta cita internacional.

En este encuentro de dos días participan más de 22 expositores nacionales e internacionales, quienes exponen las mejores prácticas y experiencias para protegerse de la delincuencia cibernética y hasta física, identidad digital, prevención de fraudes, seguridad de la información y seguridad lógica.

La exposición de Gómez revela otras cifras. En el 2002 se produjeron 1 100 ataques cibernéticos por semana en el mundo en los bancos, retails y otros organismos.

Los bancos y las empresas de ciberseguridad, digitales o de productos de protección de los servicios digitales de las empresas discuten sobre cómo ser más seguros. Pero, además, cómo proteger a los clientes.

Gómez expone que una de las maneras de prevención de fraudes es el uso y desarrollo de la inteligencia artificial en las empresas.

También muestra que el año, el costo global de los ataques alcanzó los 6 billones de dólares, mientras que para el 2025 se proyectan 10,5 billones.

Él menciona los tops de los ataques más comunes que ocurren en Latinoamérica, según una encuesta del 2023.

  1. Phishing
  2. Ransomware
  3. Ataque de malware
  4. Ingeniería social
  5. Explotación de vulnerabilidades día cero
  6. Suplantación dirigida a un objetivo
  7. Amenazas internas
  8. Denegación de servicios

Gómez comenta que los ciberataques en Latinoamérica seguirán en aumento y probablemente el ransomware, por sus beneficios económicos, se mantenga en el top. En Ecuador, el ransomware es el que más usa para atacar a las entidades.

Los bancos privados avanzan en la ciberseguridad

Marco Rodríguez, presidente Ejecutivo de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca), comentó que la importancia de estas jornadas es la lucha contra la delincuencia organizada. Para ello, como gremio realizan acciones con el sector público y la sociedad, con organización.

Él señala que el uso de la inteligencia artificial es una herramienta efectiva para la prevención de fraudes y se incluyó como uno de los temase esta jornada. También la transformación y los desafíos de la implementación de la Ley de protección de los datos personales.

Esta jornada permiten la observación de las tendencias actuales, pero también evidencia el esfuerzo del trabajo de los bancos, para la transformación digital y la lucha contra la delincuencia.

Resaltó que los bancos ecuatorianos se encuentran a la vanguardia. Según él, cerca del 90% de los servicios bancarios están disponibles vía digital.

El incremento de los canales digitales y la adaptación de los modelos de negocios bancarios a la digitalización están acompañados de fuertes esquemas de seguridad.

Los bancos ecuatorianos responden al reto de la digitalización y la ciberseguridad. Precisamente, el sector bancario privado es uno de los más regulados y controlados en el país.

Adicionalmente, los bancos privados realizan importantes inversiones en el desarrollo de tecnologías para blindar y fortalecer la seguridad en los servicios que ofrecen a sus clientes, manifestó.

Un trabajo conjunto para mitigar riesgos

Bruno Sánchez, gerente comercial de la empresa Onducloud, comenta que el sistema de seguridad bancario es muy fuerte. Pero, en temas de seguridad nada es infalible y no hay un 100% de garantías de que nada va a pasar.

El sistema bancario tiene desarrollada mucha madurez en procesos, políticas, procedimientos y adopción de controles.

Estos espacios permiten entender un poco qué más podemos hacer, sin embargo, siempre hay una brecha que cubrir. Pero el trabajo que nos queda a todo el ecosistema es trabajar en conjunto para mitigar esos riesgos.

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