A solo horas de que se cumplan los tres días para presentar el recurso de apelación a la sentencia en el caso Sobornos de los tres procesados a los que el Tribunal de Juicio les negó el recurso de ampliación y aclaración, ayer la defensa del exministro Walter Solís, Jorge Luis Ortega, presentó nuevamente su apelación en la Corte Nacional de Justicia (CNJ).
Ortega aclaró que esta es la sexta ocasión que presenta la apelación a una sentencia «diminuta, inmotivada y que no cumple con los requisitos de ley», debido a que no ha existido caridad en cuanto a plazos y términos. Explicó que hasta el hoy no han sido notificados con la sentencia completa, sin embargo, para evitar caer en «trampas» y ante la inseguridad jurídica, dijo, se vieron obligados a presentar nuevamente el recurso.
Otro de los abogados que confirmó presentaron nuevamente el pedido de apelación, pese a que ya anteriormente lo habían hecho, fue Alfonso Zambrano Pasquel, defensa del expresidente Rafael Correa, sentenciado a ocho años de cárcel en calidad de autor mediato del delito de cohecho agravado.
Solís recibió la misma pena de ocho años, pero como coautor.
Zambrano Pasquel aseguró que la negativa a la ampliación y aclaración que solicitaron y que fue notificada, el lunes último, es algo que estaba en el margen de lo previsto. Pese a que el Tribunal de la CNJ les ha dicho que todo estaba claro en el fallo y no había nada que ampliar, él cree que habían temas importantes que debía ser ampliados y aclarados.
El abogado del exmandatario reconoce que ellos como defensa tienen sus ojos puestos en la apelación.
Dos aspectos básicos mantendría la apelación del expresidente: que no se practicó correctamente la prueba que solicitaron, en el sentido que necesitaban y no se dio una ampliación de los testimonios de Laura Terán, Pamela Martínez y José Santos, lo que generaría una nulidad; y que el Tribunal de Juzgamiento no cumplió con una adecuada motivación del fallo.
«Eran muy importante esas pruebas y no se practicó. Yo insistí (…) El Tribunal no le dio importancia y eso trae como consecuencia el limitar el ejercicio a la defensa. Eso es causa de nulidad», señaló.
Marcelo Dueñas, parte de la defensa de la actual asambleísta Viviana Bonilla y el exlegislador Christian Viteri, ambos sentenciados a ocho años de cárcel en calidad de coautores, también sería uno de los abogados que colocó por al menos cinco ocasiones su recurso de apelación en la CNJ en el caso Sobornos.
Él sostiene que la primera fase de este caso no ha terminado y no se puede pasar a la apelación, mientras no se le conteste un pedido de revocatoria de una providencia, al no quedar claro desde cuándo empezaron a correr los plazos y términos en este caso, luego de que por la emergencia por el COVID-19 existió una resolución de la CNJ que suspendió los mismos.
«La CNJ ha caído en una serie de contradicciones, de ilegalidades que tiene que responder con la revocatoria que se ha pedido. Además, he solicitado que me reciba la sala, en presencia de la Fiscal y el Procurador, para que me aclare en qué medida respetaron la resolución del CNJ y desde cuando empiezan a correr los plazos», apuntó Dueñas, al tiempo que dijo que apelarán las sentencias de Bonilla y Viteri porque no existe el delito que pretendió la Fiscalía, no se ha comprobado la materialidad de la infracción, la participación, ni las condiciones referidas en la sentencia.
Audiencias telemáticas
En lo referente a un posible uso de sistemas tecnológicos para la realización de la audiencia de apelación, Alfonso Zambrano Pasquel no ve que existan dificultades mayores para la realización de la misma, debido a que no se presentan nuevas pruebas, sino que se resuelve en base al mérito de lo actuado en la etapa anterior.
Aún así aclara que esas condiciones tecnológicas para un fluido desarrollo deben ser garantizadas por el Consejo de la Judicatura. Cree que es importante que en Ecuador se haga conocer públicamente la sustanciación de las audiencias y exista una transmisión de las audiencias para que haya una auditoría social adecuada.
Mientras que Marcelo Dueñas se opone a que se realice una videoaudiencia pues, según él, se pondría en riesgo el principio de inmediación. El defensor adelantó que una vez se convoque a la audiencia de apelación de la sentencia en el caso Sobornos el asistirá personalmente a la diligencia, pero guardando todas las medida de bioseguridad y esperando que la administración de justicia también le brinde las garantías del caso. (El Universo).