Su rostro y su sonrisa desbordaban de alegría. Su corazón cien por ciento amarillo parecía salirse de la emoción. Allí, en una silla de ruedas, María Ernestina Delgado Rivas, la más barcelonista de los manabitas, no podía creer que el presidente de Barcelona, Carlos Alfaro Moreno, estaba en su hogar.
Hasta su casa, en la ciudadela Río Guayas, en Picoazá, provincia de Manabí, a la cual regresó luego de ser dada de alta por una neumonía que la afectaba, a doña Angélica le llegó un ángel torero.
La mujer, de 89 años, quien considera que por sus venas corre sangre amarilla, y su familia es barcelonista fueron sorprendidos la mañana del domingo por el Beto.
El dirigente torero aprovechó su estadía en tierras manabitas para protagonizar un emotivo momento. Se dio el tiempo para compartir con la hincha longeva, mostrarle su agradecimiento por su amor al club y dejarle algunos presentes.
La historia de la ancianita que publicó Diario EXTRA hace pocos días, en la que se hizo público el petitorio de la octogenaria para que cumplan su voluntad, de tener un funeral a lo Barcelona, conmovió a Alfaro y al país.
En gratitud a ese amor por el Ídolo, Alfaro y la directiva decidieron nombrar a la abuelita como una nueva socia del club. Para dejar oficialmente plasmado este acto se le hizo la entrega de un diploma.
La manabita podrá cumplir uno de los sueños que ha dado a conocer con gran ilusión. Gracias a un carnet podrá acudir al estadio Monumental para ver de cerca al equipo de sus amores.
Esa noticia causó una algarabía en la humilde vivienda. Los allegados a la fanática aplaudieron y se mostraron eternamente agradecidos por este gesto. “Será un día que ella no podrá olvidar, incluso para nosotros”, exclamó Gema Saltos, nieta.
Dolores Vera, hija de doña Angélica, también estaba emocionada ante la presencia Alfaro y a nombre de su madre deseó los mejores éxitos al directivo en sus funciones.
De cerca
Alfaro palpó de cerca el fanatismo de la abuelita. Fue testigo de la habitación que está pintada de amarillo, de las sábanas, toallas, muñecos y varios objetos alusivos al cuadro torero.
La colección de sus doce camisetas de Barcelona aumentó con la que Alfaro le llevó, como obsequio de parte de los jugadores canarios.
El Beto le entregó una camiseta original firmada por todos los elementos de la plantilla del Ídolo, dedicada con mucho cariño por ser una aficionada de alma, vida y corazón.
Luego de aquello, en un momento tierno, el presi amarillo besó la frente de la viejita, quien no pudo ocultar su emoción.
Días de alegría
Para la longeva las alegrías en estos últimos días han venido unas tras otras. El sábado, desde Guayaquil, le llegó una camiseta del mediocampista Gabriel Márquez. La entrega se dio gracias a la gestión del guayaquileño Fernando Santos, administrador de la página Mundo Amarillo.
“Ella envió desde el hospital un vídeo deseando éxitos al jugador antes del partido con Progreso (por Copa Libertadores), él le retribuyó con este regalo especial”, destacó la nieta.
Para la hincha manabita, las victorias de su equipo son consideradas como una ayuda emocional. Y es que a más de las oraciones de su familia, para que su salud mejore, la clasificación torera a la Fase 2 de la Libertadores fue como un aliciente para sus problemas respiratorios.
El momento
La presencia de doña Angélica en el estadio Monumental se dará en los próximos días. Sus familiares esperan planificar un viaje hasta Guayaquil para que ella pueda cumplir su anhelo.
Vale recordar que desde los 11 años la manabita es una aficionada de Barcelona. Su padre le heredó este amor al equipo. Su esposo que falleció hace 32 años también era un ferviente hincha amarillo.