Artesanos exponen sus obras en Museo del Palacio de Gobierno en Ecuador

Con el objetivo de mostrar y rescatar el trabajo que realizan los artesanos ecuatorianos, en las salas del Museo del Palacio de Gobierno se exhiben sombreros finos de paja toquilla, macanas de encendidos colores y joyas de filigrana, que forman parte de la exposición “Artesano–Artista”, que se inauguró el 1 de agosto.

“Las artesanías son una muestra de las tradiciones de nuestros pueblos, un legado que debemos proteger, y portar con orgullo”, señaló Rocío de Moreno, presidenta del comité interinstitucional Plan Toda una Vida.

La exposición unificó 150 piezas históricas, artesanales y artísticas que destacan el oficio de quienes plasman con sus manos la memoria y raíces de su pueblo.

Las piezas se enfocan en tres técnicas: tejido con la paja toquilla para elaborar finos sombreros; el ikat, con el que confeccionan macanas o paños de Gualaceo; y la filigrana, que con delgados hilos de plata se plasman delicadas joyas y artículos decorativos.

“Tal es la belleza de estos objetos, que a menudo no sabemos si estamos frente a una artesanía o frente a una obra de arte”, resaltó Rocío de Moreno.

Sombreros de Pile en Manabí

Simón Espinal, el mejor tejedor de sombreros de paja toquilla del país, llegó desde Pile (Manabí), a la sede de Gobierno para participar en la inauguración de la muestra.

Ahí tuvo la oportunidad de mostrar sus destrezas para tejer uno de estos artículos, especialidad de los habitantes de esa comunidad.

“Estoy agradecido de mostrar mi trabajo en este espacio que impulsa el arte y la cultura. Es importante que esta actividad no se pierda, y que el mundo conozca que en Ecuador se tejen los sombreros más finos del mundo”, enfatizó Espinal.

Junto a él, en uno de los pasillos del Palacio, Carmen Fares -artesana del Azuay- tejía otro sombrero. La técnica la aprendió de su madre, a los 6 años pues en esta zona austral, las mujeres elaboran estos productos sentadas o caminando.

“Mi abuelita tejía mientras cuidaba el ganado”. Gracias al trabajo de los artesanos, en 2017, el país exportó $ 7 millones  en sombreros, según datos del Ministerio de Comercio Exterior.

Intervención de instituciones

Para rescatar e impulsar  esta actividad artesanal, por iniciativa de Rocío González, varias instituciones estatales empezaron una intervención para mejorar la calidad de vida de los habitantes de Pile, en donde cerca de 400 familias viven de este arte.

A fin de preservar los toquillales y mejorar su producción, el Ministerio de Agricultura capacitó a más de 200 comuneros y productores en el manejo del caracol terrestre africano que afecta a este tipo de cultivos.

Y con el aporte del Ministerio del Ambiente se colocaron trampas en cinco hectáreas de cultivos para la captura de la plaga, que amenaza los toquillales.

Acuerdos

Antenas Wilson Alarcón, presidente de esta comunidad, señaló que se están cumpliendo los acuerdos a los que llegaron los ministerios para mejorar la vida de los habitantes de Pile.

Así la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) instaló antenas de comunicación para que las cerca de 1.200 familias del poblado cuenten con telefonía fija, celular y conexión a internet.

“Este es un servicio que habíamos solicitado hace mucho tiempo, ahora ya podemos estar en contacto con nuestros compradores y comercializar directamente los sombreros”, destacó Alarcón.

El Ministerio de Comercio Exterior trabaja en la creación de la “Marca País” para lograr el posicionamiento del sombrero fino de paja toquilla a escala nacional y mundial, para lo cual se han desarrollado varias actividades de promoción.

En España, por ejemplo, se designó al grupo musical La Oreja de Van Gogh como embajador del sombrero, luego de ello incluyeron este artículo en el videoclip de la canción “Esa chica”.

Asimismo, la Secretaría Plan Toda una Vida trabaja con la comunidad a fin de  desarrollar un micromercado y crear huertos agrícolas para la producción de alimentos de autoconsumo y comercialización, con apoyo de la empresa privada.

Macanas

Carmen Orellana, artesana de Gualaceo, sentada en un telar de cintura, entrecruzaba hilos para exhibir la técnica del ikat que se utiliza para elaborar las macanas que históricamente fueron utilizadas por las cholas cuencanas.

Ella y Manolo Jara, artesano de filigrana, llegaron desde el Austro para exhibir sus creaciones. Entre las joyas elaboradas en oro y plata, que también forman parte de la muestra artística, sobresale una candonga de 1,85 metros por uno, elaborada por varios artesanos de Chordeleg, que reposa en el Museo Municipal de dicho cantón.

Con la intervención de las instituciones estas artesanías también serán impulsadas por el Gobierno, y para ello, el 12 de julio se realizó la reunión de trabajo “Emprendimiento con artesanos”, en la que también participaron autoridades locales.

En el diálogo, Eva García, ministra de Industrias, destacó el apoyo a las pequeñas y medianas empresas (Pymes) del cantón, que ya exportan 179 productos desde junio de 2017 con el apoyo de esta cartera de Estado.

También informó que se pondrá a disposición de los artesanos una plataforma electrónica gratuita para que puedan vender desde sus casas al interior y exterior del país.

Turismo

El ministro de Turismo, Enrique Ponce de León, dio a conocer que se trabajará para que Chordeleg forme parte de los pueblos mágicos, una vez que esta cartera de Estado firme un convenio con México para este propósito.

A estas iniciativas se sumará la mesa de diálogo que convocará el presidente Lenín Moreno con todas las instituciones de Gobierno vinculadas a este sector, para que escuchen a los artesanos y den alternativas a sus necesidades.

“Aún existe una deuda con la artesanía del país, es necesario tomar el ejemplo de países como Colombia o México que han dedicado esfuerzos para el fomento del diseño, control de calidad, promoción, innovación, venta y creación de museos solo de artesanías”, precisó el Mandatario.

“Debemos valorar el trabajo de nuestros artesanos en su justa medida, no solo con un valor artístico, simbólico y social, sino también monetario en función del oficio aprendido a lo largo de toda una vida llena de dedicación, trabajo y amor”, acotó Rocío González.

Esta es la segunda ocasión que se presenta esta exposición, la primera fue en diciembre de 2017 durante la inauguración del primer centro cultural ecuatoriano en Madrid (España). (El Telégrafo)

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *