Los procesos de remisión establecidos en la Ley derogatoria del impuesto verde beneficiarán a 331.200 contribuyentes. El incentivo consiste en la condonación del 100% de intereses, multas y recargos para quienes tengan obligaciones pendientes por este tributo hasta el 16 de agosto pasado, cuando entró en vigor la Ley.
Para acogerse a la remisión, el ciudadano deberá realizar el pago del capital del impuesto ambiental que se genere hasta el 27 de diciembre próximo, en cualquier entidad financiera.
El propietario del vehículo no requiere la presentación de una solicitud para acceder a la remisión tributaria. El SRI reflejará en su sistema electrónico, a partir de la segunda semana de septiembre de 2019, los valores solo de capital, sin incluir los montos de intereses, multas y recargos.
Quien no cancele el saldo de capital pendiente hasta la fecha prevista en la Ley entrará automáticamente en un plan excepcional de pagos. El SRI dividirá el capital en tres cuotas iguales anuales, que deberán ser pagadas según el calendario de matriculación fijado para los años 2020, 2021 y 2022. El incumplimiento en el pago elimina el beneficio y, con ello, los contribuyentes deberán pagar el capital con intereses, multas y recargos.
El impuesto se creó en el 2012, con el fin de reducir las emisiones al ambiente y motivar la renovación del parque automotor. La norma gravaba a los autos desde más de 1.500 cc y era mayor para vehículos de mayor cilindraje y antigüedad.
Pero según los asambleístas que votaron a favor de la derogatoria, la recaudación del tributo fue desproporcional y no sirvió para financiar planes de manejo ambiental. El impuesto tuvo varias rebajas y desde este año debía pagarse en un 100%.
Hasta mayo del 2019, la recaudación por esta medida sumó USD 863 millones. De ese monto, entre enero y el 16 de agosto pasado se han recaudado 82,45 millones. Hasta esa fecha, el Servicio de Rentas registra, además, una cartera vencida por 242,1 millones. Los procesos de coactivas generados por obligaciones impagas quedarán sin efecto, tras la Ley derogatoria.
Esa norma también incluyó beneficios para los contribuyentes que en este año aún no han pagado el tributo (porque están en mora o porque aún no llega la fecha de cancelación).
Para estos conductores, la rebaja es el 50% del impuesto a cancelar. La medida aplicará de oficio a todos los vehículos de transporte terrestre de motor mayor a 2.500 centímetros cúbicos (cc) y con una antigüedad de más de 5 años, contados desde el respectivo año de fabricación del vehículo. Para este beneficio tampoco se requiere la presentación de una solicitud escrita por parte del propietario del auto.
César, quien no quiso dar su apellido, adquirió hace tres años un Land Cruiser de 1994, con un motor de 4.500 cc. Antes de que deroguen el impuesto ambiental pensaba vender su vehículo, porque el tributo ambiental era demasiado alto. Entre 2016 y 2018 había pagado USD 2 100 en total y este año le correspondía un valor de USD 1.500, que no había cancelado.
Este contribuyente dice que no venderá el auto y cancelará el impuesto de este año con el descuento del 50%. El joven está a la espera de que el SRI actualice los valores en la Web para hacer la matriculación.
Danilo Paladines, subdirector del Colectivo Fuera Impuesto Verde, cree que la actualización del sistema es urgente. “La gente que no ha pagado no puede circular. Para muchos, los vehículos son un instrumento de trabajo”. La autoridad tributaria informó que el sistema con los valores a pagar de este año también se actualizarán la siguiente semana.
Otro de los aspectos de la ley derogatoria es que el SRI no devolverá recursos a las personas que ya pagaron el impuesto hasta antes del 16 de agosto pasado, o que consideran que hicieron cancelaciones indebidas o en exceso.
Paladines indicó que la Ley es positiva, aunque no beneficia a todos. Por ello, el movimiento Fuera Impuesto Verde insistirá ante la Corte Constitucional, para que se pronuncie sobre la demanda de inconstitucionalidad al tributo, que fue presentada en el 2011.
Según él, si el ente acepta el pedido quedaría sin efecto el impuesto y se debería retribuir a los contribuyentes el dinero pagado en el pasado.
Paladines indicó que preocupa que el Ejecutivo analice nuevos impuestos para los autos. El Ejecutivo ha señalado su intención de reestructurar en el futuro el sistema tributario para incorporar nuevos impuestos en materia ambiental que sí logren cumplir sus fines adecuadamente. (El Comercio)