Los transportistas urbanos no pierden la esperanza de que se concrete la revisión de la tarifa del servicio en Quito. Con esa consigna, esta mañana, dirigentes y conductores de buses llegaron hasta el Centro Deportivo Iñaquito, en la avenida Atahualpa, en el norte.
En el sitio estaba convocada una reunión entre el gremio, el alcalde la capital, Jorge Yunda, y funcionarios municipales. La cita estaba prevista para las 09:00, pero en el lugar informaron que el burgomaestre ingresó al establecimiento más temprano.
Mientras en el interior se realizaba la reunión, en el ingreso del centro los transportistas se mantenían firmes con la revisión de la tarifa. Patricio Armas, accionista de la operadora Catar, manifestó la inconformidad del gremio al ser parte de la única ciudad del país en la que no se ha dado paso al alza de las tarifas. Son 16 años con el mismo valor, 25 centavos.
Armas habló de que aceptarían una tarifa de 35 centavos, mientras entra en funcionamiento el Metro de Quito.
El 10 julio pasado, durante un recorrido por el Registro de la Propiedad, el Alcalde dijo que la Secretaría de Movilidad está trabajando en la definición de una tarifa que permita mejorar el transporte público. Y contó que esperaba que en dos semanas o 21 días (contando desde dicha fecha) ya se pueda tratar en el Concejo Metropolitano el tema.
Días después los transportistas participaron de un taller para conocer la propuesta municipal para el valor de los pasajes.
Hernán Tirira, de la operadora Transporte Guadalajara, en la ruta Pueblo Blanco-Asamblea, se unió al clamor. Manifestó que están dispuestos a mejorar el servicio, pero que la ciudadanía no se olvide que hay otros actores. Por ejemplo, las autoridades deben implementar mejor infraestructura, como más paradas. Y hay muchos usuarios que no respetan las existentes.
El transportista también hizo un llamado para el control de la informalidad ya que esto perjudica aún más los ingresos.
Este jueves, fuentes de la Alcaldía indicaron que la reunión en el norte de Quito era de carácter privado. Y que el burgomaestre estaba escuchando un pliego de peticiones del sector sobre tarifas, proceso de cupos y control.
Alrededor de las 10:00, salió Danny Gaibor, director de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) para indicar que sí se dará paso a la revisión de la tarifa y que hay el compromiso del Alcalde de llevar el tema al Concejo. Todavía no habló de una cifra puntual.
Además, informó que se dará el pago de las compensaciones económicas pendientes para los transportistas, que estaban impagas desde la administración anterior. Se habían depositado hasta octubre del 2018 y está Administración ya lo hizo hasta enero del 2019. Ahora el desembolso sería de febrero, marzo y que analizan el monto pendiente de febrero del 2018.
Gaibor, por otra parte, indicó que se mantendrán los controles a la informalidad y que se intensificarán incluso con la Policía Nacional. Esto porque se sabe que habría hasta falsificación de documentos.
Más adelante, Héctor Guevara, gerente de Catar, se pronunció. Corroboró que la reunión fue con el Alcalde; el vicealcalde, Santiago Guarderas; el secretario de Movilidad, Guillermo Abad, y Gaibor.
Destacó la voluntad y la apertura de Yunda. A él le hicieron conocer las necesidades, principalmente las tarifas.
Guevara contó que en la reunión les informaron que ayer, a las 13:40, la estructura tarifaria ingresó a la Comisión de Movilidad del Cabildo y que Guarderas se comprometió en dar el trámite para que el tema sea analizado en el Concejo.
En los exteriores del Centro Deportivo Iñaquito se habló sobre otros tópicos. Hernán Castro, de Asometrovip (49 unidades), pidió más control a la informalidad en el corredor Simón Bolívar, donde ya hubo un proceso de regularización.
Los transportistas se oponen a la habilitación de más compañías en la avenida Simón Bolívar, así como el costo del pasaje. Castro aseguró que eso complicaría la circulación y la competencia generaría «correteos» en la vía.
Añadió que continúa la inseguridad para conductores y ayudantes pues el martes 27 de agosto una de sus unidades fue nuevamente asaltada. Carmen Sasig, representante de la compañía Transperiféricos, también está en contra de que se otorguen más permisos de operación para compañías de transporte en la Simón Bolívar.
«Desgraciadamente tendremos que salir con todo nuestro personal a la vía», añadió. Asegura que hay mucha competencia entre unidades lo que colapsa más la concurrida avenida.
Entre los pedidos están la revisión de las tarifas, la revocación de contratos a compañías que operan sin permisos oficiales, el cierre del proceso de la ordenanza 108, el proyecto de sistema de recaudación público y la conformación de operadoras del sur de Quito.
Armas, representante de la compañía Catar, dijo que ya llevan 17 años sin aumentar la tarifa en los buses «a pesar de que Quito cuenta con el mejor parque automotor del país». Sostuvo que el posible aumento de sería ideal que se apruebe. (El Comercio)