La violencia volvió a estremecer a Manta la madrugada de este miércoles. Pasadas las 00:30, el sonido de los disparos rompió la tranquilidad en el portal de una vivienda ubicada en la calle 11 y avenida 13, donde familiares y vecinos participaban en un rezo en honor a una imagen religiosa. Lo que debía ser una noche de fe y recogimiento terminó convertido en una escena de pánico y muerte.
Según versiones preliminares, varias personas se encontraban reunidas en el acto religioso cuando sujetos desconocidos llegaron hasta el sitio y abrieron fuego sin mediar palabra. En medio del caos, los asistentes corrieron despavoridos tratando de refugiarse detrás de las paredes y vehículos cercanos, mientras el eco de las detonaciones se escuchaba en todo el vecindario.
En el lugar, perdió la vida de manera instantánea Steven Andrés Puertas Idrovo, conocido en redes sociales como “El Novita”, un joven creador de contenido muy popular en Manta. Su cuerpo quedó tendido en el portal donde minutos antes compartía con los presentes.
Consternación y nuevas víctimas en el distrito más violento
Pese a los intentos por socorrer a los heridos, en el hospital se confirmó el fallecimiento de Diego Bernabé Joza Zambrano, un barbero que también se encontraba en el rezo. El tercer afectado, identificado con las iniciales C. J., permanece bajo observación médica en el área de emergencia, luchando por recuperarse de las heridas sufridas durante el ataque.

La Policía Nacional llegó al sitio y recogió varios indicios balísticos esparcidos en la calzada, además de levantar testimonios de quienes lograron escapar del ataque. Los agentes también ubicaron cámaras de seguridad en los alrededores para extraer videos que permitan identificar a los responsables y reunir características de los sospechosos.
Las investigaciones se centran ahora en determinar el móvil del crimen y si el ataque estaba dirigido hacia una persona en particular o si se trató de una agresión indiscriminada. Mientras tanto, el dolor y la incertidumbre persisten entre los habitantes del sector, que vuelven a vivir de cerca el drama de la violencia que no da tregua en Manta.












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