El crimen no da tregua en Santo Domingo. Clemencia Cabezas, alias Negra Cleme, una supuesta expendedora de droga, fue asesinada con un tiro en el cráneo, la mañana de ayer, tres días después de la masacre ocurrida en la cárcel de la ciudad.
La mujer, de 44 años, fue victimada en las afueras de su domicilio, ubicado en la Cooperativa 22 de Agosto, en el sur de la ciudad, cuando intentaba salvar la vida de su novio.
Un testigo contó que Cabezas y Leiber Barrez fueron atacados mientras conversaban.
Dos sujetos se bajaron de una motocicleta, se acercaron a él y le dieron varios tiros en el pecho. Al ver esto, la mujer quiso defenderlo, pero los sicarios le apuntaron en la cabeza y le metieron un ‘pepo’. Ambos murieron al instante.
Amigos de las víctimas llamaron al ECU-911 para reportar el hecho, pero los paramédicos que llegaron solo corroboraron la muerte de la mujer. Su hijo lloraba desconsolado a pocos metros del cadáver y cuando lo subieron a la camioneta de Medicina Legal, el niño intentó acercarse para despedirse.
INVESTIGACIÓN
El coronel Gustavo Játiva, jefe subzonal de Santo Domingo, indicó que este barrio ha sido identificado como uno de los más conflictivos con respecto a la venta de droga. Hace dos meses realizaron un operativo en el lugar y capturaron a tres expendedores ‘pesados’, quienes a los pocos días salieron de prisión.
El oficial aclaró que esta zona está controlada por la agrupación criminal denominada R7. En algunos murales del sector donde asesinaron a la Negra Cleme había grafitis de Pablo Escobar acompañados de figuras de pistolas, calaveras y el nombre de la organización delictiva.
La hipótesis que manejan las autoridades es que los miembros de otras bandas quieren hacer una ‘limpieza’ de los integrantes del grupo R7, quienes han causado zozobra en la ciudad y en la prisión. Ambas víctimas serían parte del grupo.
Cabezas registraba varios antecedentes penales por tráfico de estupefacientes desde el 2013. Su pareja, con quien se habría juntado hace poco, supuestamente se inició en el negocio ilegal y este era presuntamente el objetivo de los criminales.
En lo que va del año, según la Policía, se han registrado 71 muertes violentas. La mayoría por sicariato. (Extra)
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