El avión que ha realizado el nuevo vuelo comercial sin escalas más largo del mundo aterrizó ayer en Nueva York tras recorrer 16.700 kilómetros, desde Singapur, en 17 horas y 25 minutos.
El Airbus A350-900ULR de última generación, llevaba 13 tripulantes y voló por la ruta norte del Pacífico y a través de Alaska (EEUU) y Canadá.
Con capacidad para 161 pasajeros, 67 de ellos en la clase preferente y otros 94 en turista prémium, dispone de un diseño especial para reducir el jet lag.
El periodista de CNN Richard Quest, entre otros, ha viajado a bordo y ha relatado su experiencia en redes sociales; el vuelo lo opera Singapore Airlines.
En 2004 Singapore Airlines empezó a cubrir la ruta Singapur-Nueva York con aparatos Airbus A340-500s, pero la abandonó en 2013 debido al alto consumo de los aviones y el elevado precio del combustible.
Bertrand Saillet, director en Asia de la agencia de vuelos FCM Travel Solutions, indicó a Efe que la nueva generación A350-900ULR («ultra-long-range» o «ultralargo recorrido») son mucho más eficientes y más ligeros debido a la utilización de materiales de tecnología punta.
El A350-900ULR, con plazas reducidas para aumentar su capacidad de vuelo, puede volar un máximo de 17.900 kilómetros o 20 horas sin escala. En principio, Singapur Airlines cubrirá la ruta Singapur-Nueva York tres días en semana y a partir del 18 de octubre la periodicidad será diaria.
Los precios actuales, de ida solo, oscilan desde al menos unos 3.000 dólares singapureses (unos 2.100 dólares o 1.800 euros) en turista prémium hasta al menos 6.000 dólares singapureses (unos 4.300 dólares o 3.700 euros) en clase preferente.
Hasta ahora el vuelo más largo del mundo era el de la aerolínea catarí Qatar Airways, que conecta Doha con la ciudad neozelandesa de Auckland, una distancia de 14.200 kilómetros que cubre en 17 horas y 15 minutos. (20 Minutos)