El respaldo a Ecuador en materia económica y social, así como la profundización de las relaciones bilaterales, fueron los ejes de la reunión que mantuvo ayer el presidente de la República, Lenín Moreno, con el presidente del Banco Mundial (BM), Jim Yong Kim.
Luego de la cita, el Jefe de Estado destacó que los vínculos con el Banco Mundial se refrescaron y avanzan bajo objetivos comunes.
“Trabajamos en lograr el equilibrio fiscal, optimizando el Estado con un sólido sistema democrático que procura la paz y el absoluto respeto a los derechos humanos”, expresó.
En este sentido, el Presidente del Banco Mundial expresó la disposición total de la institución para apoyar los esfuerzos del país, en su camino hacia una economía más sólida y, sobre todo, en la protección de los derechos de los más pobres del Ecuador.
Jorge Familiar, presidente del Banco Mundial en América Latina, indicó que la relación entre Ecuador y la entidad financiera ha venido creciendo y profundizándose.
En la cita bilateral entre ambas autoridades también se analizó la importancia de proteger a los segmentos poblacionales considerados más vulnerables y marginados, además de continuar en este camino hacia una comunidad fortalecida.
El presidente Moreno acudió a la reunión en compañía del ministro de Relaciones Exteriores, José Valencia; el secretario particular de la Presidencia de la República, Juan Sebastián Roldán; el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, y el embajador de Ecuador en Estados Unidos, Francisco Carrión. Luego de la reunión, el Jefe de Estado tenía previsto asistir al foro de inversionistas Americas Society Council of Americas, así como con el economista estadounidense Jeffrey Sachs.
BID otorgó préstamo
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo de $ 100 millones destinado a mejorar la inclusión y atención de personas con discapacidad y grupos vulnerables, informó la institución en un comunicado.
Se trata del primer programa de préstamo de este tipo que destina el BID al país, a fin de mejorar la inclusión social de personas con discapacidad y prevenir la violencia y protección de las mujeres y menores, “mediante el fortalecimiento del marco normativo, institucional y operativo de los servicios de educación, salud y protección social”.
El programa comprende el diseño e implementación de políticas y reglamentos que promuevan la inclusión social y oportunidades mejorando el acceso al sistema educativo de los más vulnerables, por ejemplo, o mediante la protección y prevención de lacras como la violencia machista o los embarazos en menores.
Incluye la puesta en marcha de un protocolo de evaluación que permita a alumnos con discapacidad auditiva y visual acceder de manera autónoma a la prueba Ser Bachiller, para postular a la educación superior.
El BID indica que la prevalencia de discapacidad en el país es del 2,6% en 2018, y afecta de manera desproporcionada a personas de menor nivel socioeconómico.
Según el organismo, el 56% de los niños ecuatorianos con discapacidad no accede a la escuela, y el 19% de la población con discapacidad no ha recibido instrucción educativa, comparado con el 4,1% de la ciudadanía sin discapacidad.
Los recursos se destinarán también a mejorar la atención y salud de niñas, niños y adolescentes y mujeres sobrevivientes de violencia, así como en la prevención de la gestación entre menores.
El programa aprobado por el BID consta de dos tramos; el primero será de $ 60 millones y $ 40 millones el segundo, con cargo a los recursos del Capital Ordinario.
El primer tramo tiene una amortización de 20 años y un período de gracia de 6,5 años. El ejecutor del préstamo es el Ministerio de Economía en coordinación con el Consejo Sectorial de lo Social. El BID destinó este año $ 250 millones para la primera línea del metro de Quito. (El Telégrafo)