Cifra de sospechosos abatidos por la Policía aumenta en Ecuador este 2023

El Comercio.- Un hombre armado fue abatido por un policía, luego de que ingresara a disparar en las instalaciones de la Fiscalía de Santo Domingo, en Ecuador. El hecho ocurrió cerca de las 14:30 del miércoles 14 de junio de 2023. Según las primeras investigaciones, el sospechoso ingresó al edificio y abrió fuego.

Un policía que se encontraba en ese lugar repelió el ataque mediante el uso legítimo de la fuerza. En el enfrentamiento el sospechoso recibió impactos de bala y murió. Su cadáver quedó afuera de la Fiscalía.

Este no es un hecho aislado. Según cifras oficiales, en lo que va de este año, la Policía ha abatido 39 presuntos delincuentes. En el 2022, en cambio, fueron seis.

Esta información también la confirmó el ministro del Interior, Juan Zapata. A través de su cuenta de Twitter escribió: “En las instalaciones de la Fiscalía provincial de Santo Domingo de los Tsáchilas, un delincuente realizó varios disparos. Por lo cual, un valiente policía, en uso legítimo de la fuerza, lo abatió. Se registran 39 delincuentes fallecidos. Ante amenazas letales, respuestas letales”.

Otros casos en Ecuador

El 2 de mayo de 2023, tres hombres ingresaron a una entidad financiera de El EmpalmeGuayas, para perpetrar un asalto. La Policía intervino y hubo un enfrentamiento armado. Un sospechoso fue abatido, otro resultó herido y el último huyó.

Al día siguiente, un policía disparó en contra de dos hombres, que presuntamente intentaron asaltar a una persona, en el sector de La Garzota, en el norte de Guayaquil.

De igual forma, el 4 de mayo del 2023, un policía dio de baja a un sospechoso, que atacó con arma de fuego a otro uniformado. Este hecho se registró en el cantón Piñas, en El Oro.

Ese mismo día, en Babahoyo, Los Ríos, hubo un enfrentamiento entre armados y agentes de la Policía. Allí murió uno de los supuestos atacantes.

¿Por qué aumentan sospechosos abatidos?

Este año, el presidente Guillermo Lasso firmó el Decreto Ejecutivo 730 que declara al terrorismo como amenaza de Estado.

En ese documento dispuso que las fuerzas militares policiales repriman la amenaza terrorista con todos los medios a su disposición.

Tras ese decreto, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional ejecutan acciones y operativos para enfrentar la amenaza terrorista de las organizaciones delictivas vinculadas con el narcotráfico y el crimen organizado.  

Durante estos operativos, los uniformados han tenido enfrentamientos armados con miembros de bandas delictivas y han muerto 39 sospechosos.

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