Para mañana el Consejo Nacional Electoral (CNE) anuncia la difusión de un proyecto de reformas al Código de la Democracia, que pretende modificar 4 temas: la inscripción de partidos políticos, de candidatos, el gasto electoral y el cambio de métodos de asignación de escaños.
Las propuestas se construyeron para evitar la dispersión político-partidaria que provocó la inscripción, en el organismo, de 278 organizaciones políticas, además de la presentación de 81.278 candidatos a las diferentes dignidades que participaron en los comicios del 24 de marzo.
Esta dispersión de partidos y postulantes provocó que candidatos obtengan triunfos con poco porcentaje de votos, como por ejemplo en Quito, donde el ganador a la Alcaldía obtuvo el 22% de sufragios.
Por eso, el enfoque de las reformas se centra en los requisitos para aprobar una organización política. Por ejemplo, el proyecto señala que antes de presentar candidatos los movimientos deberán acreditar por lo menos 2 años de trabajo en capacitación a sus militantes.
El objetivo es fortalecer a los partidos, así como a sus miembros; por eso y de la misma manera, los candidatos tendrán que acreditar dos años de militancia.
El consejero Luis Verdesoto indicó que las reformas incluyen nuevos mecanismos de financiamiento público y privado.
Para esto se añadirá la figura de un fedatario electoral, para cada partido, quien será designado por el Consejo de la Judicatura de una terna enviada por el Tribunal Contencioso Electoral (TCE).
Este funcionario se encargará de revisar las cuentas, así como el origen de los dineros que ingresan a las organizaciones políticas.
Asimismo, se consideran los temas de comunicación y política, con el establecimiento de los debates electorales, como parte de la expresión durante las campañas.
Verdesoto afirmó que la propuesta considera el tema de diferenciar los procesos administrativos de los judiciales electorales, por lo que se asignarán competencias nuevas al CNE y al Tribunal Contencioso Electoral (TCE).
El Vicepresidente del organismo, Enrique Pita, dijo que las reformas incluyen el financiamiento a las candidaturas. Afirmó que el Estado invierte recursos económicos y quienes se inscriben saben que cuentan con un financiamiento, pero si el postulante no obtiene un mínimo de votación que permita justificar la inversión, estará obligado a reponer ese dinero.
“Solo así ya no existirá esta aventura de postularse tan ligeramente, como actualmente sucede”, enfatizó. Otro de los cambios propuestos es la eliminación del método D’hont para la designación de escaños. Verdesoto dijo que en su lugar se aplicará el método Webster para asambleístas nacionales y provinciales y el cociente de Hare para las juntas parroquiales.
“De esta manera se establecerán mejores mecanismos de participación, especialmente de las minorías”. Esteban Ron, director de Carrera de la Universidad Internacional (UIDE), comentó que las reformas al Código de la Democracia deben ser de carácter integral y no solo coyuntural.
El experto opinó que proponer retoques o normas parche trastocan el sistema electoral del Ecuador, volviéndolo ineficiente y hasta en determinadas ocasiones, inaplicable.
Una vez que las reformas se socialicen con los partidos, se enviará el proyecto a la Asamblea de manera que hasta diciembre se apruebe, antes del inicio del periodo electoral 2021, para elegir presidente, asambleístas nacionales y provinciales. (El Telégrafo)