La migración a una gasolina de menor octanaje ya se empieza a sentir en el país. Entre 40% y 50% se ha reducido la venta de gasolina súper (de 92 octanos) tras la eliminación del subsidio a este combustible decidida por el Gobierno el 27 de agosto pasado. Así lo explican directivos del sector de comercializadoras de gasolina, así como administradores de varias gasolineras. Además se ha incrementado la venta de gasolina extra(85 octanos), explican.
Según Francisco Silva, presidente de la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados de Petróleo, esta migración fue advertida por parte de su gremio, el cual había pedido al Gobierno que realizara una campaña de concienciación para que el consumidor entienda los inconvenientes de hacerlo.
También explicó que, de acuerdo a los cálculos técnicos que han realizado, la mejora en la calidad de la súper que subió de 90 a 92 octanos y la migración a la extra (que desemboca en un mayor subsidio) terminarán anulando el ahorro que el Gobierno buscaba.
Por su parte, Jorge Cajiao, representante de la Federación de Distribuidores de Combustibles del Ecuador en Pichincha, explicó que de acuerdo a los reportes de sus asociados en el sector rural se ha reducido en 50% y en la ciudad un 40%, mientras que el consumo de extra ha subido de 20% a 30%.
En este sentido, también dijo que se ha visto un margen de consumidores que están dejando de consumir la gasolina, tal vez por un uso menor del vehículo. Otro tema que ha llamado la atención es la mayor venta de aditivos para el motor. Esto porque las personas que han cambiado de súper a extra buscan cuidar su motor con dichos complementos.
En un recorrido que realizó este Diario en varias gasolineras, sus administradores y dueños confirmaron la baja en la venta de súper.
En una de ellas, ubicada en el sector norte de Quito, Fernando Macías explicó que en su caso la caída de las ventas también ha hecho que él en particular aún no haya pedido un nuevo despacho, por lo que aún está vendiendo gasolina súper de 90 octanos.
También comentó que su situación es difícil, pues en 18 años no se ha revisado el margen de utilidad.
¿Pero qué tan conveniente para el motor de un auto es migrar de la gasolina súper a la extra? Pedro Villota, dueño del taller P. Villota Psicología Automotriz, asegura que todo depende del tipo de compresión del automóvil.
Sin embargo, hay autos antiguos (del año 2000 hacia abajo) que pueden consumir la extra. Los más nuevos, en cambio, dependiendo de la marca, son susceptibles a daños si no consumen la súper, explica.
De no utilizar la gasolina correcta puede haber problemas de cascabeleo, que puede terminar con daño al motor.
También explicó que el uso de aditivos no ayuda realmente si el auto es de alta tecnología y de alta gama. (El Universo)