Un laudo arbitral con fallo a favor del arquitecto Ramiro Padilla «ata de manos» a la Federación Deportiva del Guayas (FDG), advirtió ayer el interventor de la Secretaría del Deporte, Jorge Murillo, quien informó que por este motivo están bloqueadas las cuentas bancarias del organismo deportivo.
El interventor en la parte legal, Cristian Yumbla, detalló los antecedentes de este caso que se remonta al 2004, cuando la extinta «Secretaria Nacional del Deporte (Senader) suscribió un convenio con FDG para la ampliación del estadio Capwell y contrató para la obra -iniciada en 2006- a Padilla por un valor de casi $ 2 millones, en un plazo de 210 días.
Pero a pesar de que FDG recibió la obra, le dejó un saldo pendiente a Padilla por un valor de $ 98.969. Hasta el 2016 esa deuda no fue atendida, por lo que en ese año FDG fue notificada por el Centro de Arbitraje y Conciliación de la Cámara de Comercio sobre un laudo arbitral que generó un fallo a favor del contratista.
Es así que a la actualidad el valor a cancelar es de $ 98.969, más los intereses legales y honorarios de la defensa del contratista, cifra que asciende a $ 128.389.
Aunque en septiembre pasado FDG interpuso un recurso de nulidad, este fue rechazado, y ante el incumplimiento de la obligación, «ayer (martes) nos notifican formalmente que están congeladas nuestras cuentas (bancarias)», afirmó Murillo.
«Esto es gravísimo, porque estamos atados de mano. No podemos pagarle a los proveedores, es una pena pero es la realidad. Y todo dinero que se deposite será retenido», comentó Murillo.
No obstante, el interventor anticipó que están teniendo un acercamiento con el abogado de Padilla para «llegar a un acuerdo de pago o si se paga con un bien, no sé todavía», dijo Murillo. (El Universo)
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