La empresa, Aguas de Manta, montó un nuevo operativo, este martes, 1 de septiembre, que terminó con el cierre de dos tuberías irregulares cuyo líquido se usaba para el reguío de plantaciones agrícolas.
La primera línea estaba en territorio del cantón Jaramijó, a 500 metros de la toma de agua El Duende. Se la había conectado al acueducto de la planta potabilizadora, El Ceibal, a través de una válvula de desague. Era tan amplia que fácilmente podría abastecer las 24 horas a todo un barrio de Manta.
La segunda línea estaba dentro de un terreno del cantón Rocafuerte, donde también se evidenció sembrío y una amplia red de riego. Personal de Aguas de Manta, con apoyo de la Policía Nacional, desconectaron estas tuberías.
Jean Carlos Montesdeoca, gerente general de la empresa, afirmó que no claudicarán en esta lucha por recuperar, de manera legal y justa, toda el agua que se le hurta a Manta y que, al final de todo, termina afectando a los mantenses.
RECUERDE:
La semana pasada, Aguas de Manta, en otro operativo, también detectó y selló sitios irregulares donde se hurtaba y luego vendía el agua a través de tanqueros. Esto ocurrió entre los sectores Villamarina y Terranostra. La pérdida en valores para Manta ante este delito era de 25 mil dólares por día.
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