Ecuador, tercer país de la región más propenso a sismos, erupciones, deslaves o afectación por fenómenos climáticos.

Los efectos negativos de estos eventos son altos. Por ejemplo, los sismos han dejado pérdidas por $8.460 millones en los últimos 50 años en Ecuador.

El 16 de abril de 2016, un terremoto de 7,8 grados -con epicentro en Manabí- expuso la vulnerabilidad física y fiscal del país ante este tipo de desastres.

El Gobierno de entonces fijó en 3.300 millones de dólares los costos de reconstrucción para las zonas afectadas, en los ámbitos social, productivo y de infraestructura.

Además, el terremoto dejó una pérdida de 21.823 empleos y generó 515 millones de dólares en pérdidas (en términos de flujos económicos perdidos).

En total, los daños causados por movimientos telúricos en los últimos 50 años en Ecuador, ascienden a 8.460 millones de dólares.

Las cifras y el propio sismo de 2016 son el reflejo de un país que, según recoge el Banco Mundial (BM), es el tercero más propenso a desastres naturales en Latinoamérica y el Caribe (detrás de Perú y Haití) y el décimo tercero a escala mundial. Esto incluye sismos, erupciones, deslaves y afectación por fenómenos climáticos.

Los datos provienen del índice de riesgo global INFORM.

Afectación social y económica

Otro tipo de eventos de consecuencias catastróficas en Ecuador son los episodios relacionados con los fenómenos El Niño y La Niña. Esto han dejado pérdidas por 4.373 millones de dólares el último medio siglo, según cálculos de la Cepal y datos de Senplades.

Un ejemplo de la vulnerabilidad del país es que en marzo de 2021, Ecuador enfrentó inundaciones y fuertes lluvias -las más intensas de los últimos cinco años- al tiempo que una erupción del volcán Sangay afectó las actividades en cinco provincias, incluido el cierre del aeropuerto de Guayaquil y daños a cultivos en más de 40 mil hectáreas.

En ese contexto, el gobierno ecuatoriano, con el apoyo del Banco Mundial, desarrolla una Estrategia de Gestión Financiera ante el Riesgo de Desastres, cuya presentación se realizó en marzo pasado. (La Hora)

Estrategia financiera ante riesgo de desastres
  • Identificación de riesgos y pasivos contingentes.
  • Manejo de riesgos a través de instrumentos financieros
  • Fortalecimiento de las capacidades técnicas del Estado
  • Identificación de la gestión proactiva del riesgo como una acción clave dentro de la estrategia financiera.

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