El femicidio también golpea a los hijos en Manta, Manabí

Diez minutos después de que su hija Roxana Cervantes Flores y su nieta dejaran su casa en el barrio 5 de Junio, en Manta, Josefa Cervantes recibió la llamada. Le dijeron que la mayor de sus cuatro hijas había sido asesinada por su cónyuge. Era el sábado 7 de enero de 2017.

Roxana tenía tres meses de separada de su conviviente.

La mataron a cuchillazos, en un hecho sangriento del que fue testigo la hija de la víctima, que hoy tiene 10 años y que aspira a ser veterinaria.

“Vivían aquí conmigo, pero un día antes ese hombre llamó a mi nieta para decirle que les iba a dar un dinero a ambas…, creo que la citó a mi hija para matarla, porque ella no quería volver con él”, menciona con pesar la mamá de Roxana.

Ayer, en el Día Internacional de Erradicación de la Violencia Contra la Mujer se efectuaron en el país distintos actos de concienciación y de exigencia de justicia. En esas actividades participaron los hijos huérfanos a causa del femicidio.

Respecto a la hija de Roxana, la abuela cuenta que la niña idolatraba a su papá, que incluso quería vivir con él. “Todo cambió tras la muerte, llegó a decir que lo odiaba, y que por qué no se había muerto él y no su madre”, expone Josefa.

Un joven de 17 años evidencia una reacción similar. Mataron a su mamá, María Asunción López, la mañana del 4 de marzo del año en curso.

De ahí en adelante, indica Jaime Pilfil, padre del menor y primer esposo de la víctima, él llega tarde de clases, reprocha y toma actitudes hostiles en contra del asesino de su madre.

Ella, así como Roxana, murió a cuchillazos. En ambos casos, quienes las enamoraron intentaron quitarse la vida clavándose los puñales. Ambos fueron sentenciados a 26 años de prisión, según confirmaron los parientes de las mujeres víctimas de femicidio en Manta.

Pilfil menciona que su hijo repite que quiere vengarse. “Le digo que no piense en eso, que se lo deje a Dios, pero me contesta diciendo que Dios no hace justicia de nada”, menciona.

De María llevaba separado dos años. Agrega que su hijo bajó en calificaciones y remarca eso de las actitudes rebeldes. Pero no es un mal muchacho, comenta el padre, que pide mayor apoyo emocional para él.

Roxana Moreira, hermanastra de María, muestra preocupación por su sobrino. “Pese a que está detenido y con 26 años de cárcel ese hombre no la devuelve a la vida, y no trae tranquilidad a mi sobrino”, dice.

Pilfil señala que no sabía de maltratos entre su exesposa y la pareja que le dio muerte, tampoco supuestamente conocía de esa nueva relación.

Según estadísticas, nueve mujeres han sido víctimas de femicidio en Manta del 10 de agosto de 2014 hasta el 4 de noviembre de este año.

Es la cifra expuesta por la Comisión Permanente de Igualdad de Género del Municipio de Manta, liderada por la concejala Lady García, quien reconoce que son cifras altas.

El jueves pasado, en Montecristi, un hombre mató a tiros a la mujer con la que procreó a su hija. Según testigos, ella presenció el crimen. (I)

Cifras

Nixon Zambrano, director (e) del departamento de Violencia Intrafamiliar de la Policía en Manta, indica que tanto el año pasado como hasta lo que va del 2018 se han producido cuatro femicidios en Manta, dos en cada año.

A nivel nacional, agrega Zambrano, en el 2017 hubo 91 asesinatos en contra de mujeres. Este año Según el Cepam, hasta el viernes se registraron 83 casos. (Neptalí Palma/El Universo)

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