Más restricciones se alistan como parte del plan del Gobierno Central y de los municipios para ralentizar la propagación de la variante delta en el país.
La medida, adoptada el miércoles 28 de julio del 2021 por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE), fue solicitar al presidente Guillermo Lasso que extienda por 30 días el estado de excepción que ya se aplica, desde hace 15 días, en Guayaquil y El Oro.
El argumento es la presencia de 85 pacientes positivos a la variante delta y que se encuentran en Guayas, El Oro, Pichincha, Azuay, Manabí y Cañar.
“La delta es más contagiosa que las otras variantes. No es más letal, pero sí, al ser más contagiosa, aumenta la posibilidad de que las personas, al adquirirla, necesiten de hospitalización y puedan fallecer”, dijo en rueda de prensa la ministra de Salud, Ximena Garzón.
Juan Zapata, director del COE, pide que, a la extensión del estado de excepción, que incluye toque de queda en El Oro, se sumen más medidas.
Estas son la reducción de aforos en restaurantes, locales comerciales y transporte público. Así como un pedido para que las empresas prefieran el teletrabajo y los municipios hagan operativos para el control de fiestas, consumo de licor y aglomeraciones.
En ciudades donde no rige el estado de excepción, pero hay presencia de la delta, ya se han adoptado acciones. En Quito se redujo los aforos en centros comerciales de 65 al 50 % y en los restaurantes pasó del 70 al 50 %. La Intendencia anunció que en esta semana aumentará los operativos para controlar los eventos masivos y el acatamiento de las medidas de bioseguridad.
En Pichincha se detectaron tres nuevos casos en esta semana. Se tratan de personas que ingresaron al país y cuyo cerco epidemiológico ya se activó.
Desde la Secretaría de Salud del Municipio se inició, hace dos semanas, la vigilancia genómica comunitaria. Esteban Arce, director de brigadas comunitarias, indica que los investigadores han recogido muestras en 10 parroquias de la capital, las que tienen las tasas más altas de contagios. El objetivo es identificar cuáles son las variantes que más circulan. “No hemos identificado aún la variante delta a nivel comunitario, pero sí hay una alta presencia de la de Brasil y la de Inglaterra”, dice.
Frente a esta evidencia, la Secretaría de Salud municipal no recomendará un estado de excepción para la capital.
Para Carola Cedilla, infectóloga pediatra, quien trabaja en Cuenca, las restricciones a la movilidad son una herramienta práctica para evitar el incremento de los contagios. Sin embargo, ella habla de la existencia de un subregistro, sobre todo entre los jóvenes y niños.
“Los casos de niños que se detectan son los que llegan a hospitalización, ya que muchas veces ellos no presentan síntomas de esta enfermedad”.
Alberto Narváez, profesor de la Universidad Central y proponente de la estrategia COVID Cero, señala que las restricciones a la movilidad en El Oro y Guayas “son excesivas”.
Su criterio es que el COE Nacional conoce las parroquias y cantones en donde se han hallado las variantes, sobre todo la delta, y que en esos lugares se deben aplicar las restricciones.
“Se necesita implementar un buen sistema de información y mejorar el rastreo. El objetivo, antes que los toques de queda, es identificar los focos calientes y apagarlos, antes que cerrar cantones enteros”.
Para el Ministerio de Salud, el plan para afrontar la delta también es aumentar el número de personas vacunadas.
Garzón dijo que en el país ya hay 10 millones de personas vacunas, de las cuales dos millones cuentan con toda la pauta completa. En El Oro se aceleró la aplicación de este tratamiento y ahora se requieren de 28 días para los ciudadanos que recibieron la primera dosis generen inmunidad. (Expreso)