En una manifestación cívica denominada “Por la salud y la vida” los chonenses recorrerán varias calles de la ciudad, para expresar su preocupación por los retrasos sufridos en la construcción del Hospital Napoleón Dávila Córdova, el mismo que fue derrocado después del terremoto del 16 de abril del 2018.
Desde entonces, Chone adolece de una casa de salud que satisfaga las necesidades de atención de la población, en la dimensión que cumplía el hospital Dávila Córdova, que además daba cobertura a la zona norte de Manabí.
El Gobierno Chino, luego del terremoto donó los dineros para la construcción del hospital. Hace 19 meses se colocó la primera piedra de la obra, desde entonces varias circunstancias como la ausencia de aisladores sísmicos en los estudios, falta de recursos para la fiscalización, protocolización del contrato y otras más, han impedido que se inicie la obra tal como se lo anunció hace casi dos años.
Ante esta dilatoria, la ciudadanía chonense protestará de manera pacífica, amparada en lo que estipula la Constitución de la República, en lo relacionado al derecho a la salud y a la organización y expresión de sus necesidades.
Al igual que Chone, Portoviejo también hizo una marcha ciudadana que contó con el apoyo de delegaciones de varios cantones de Manabí. María Auxiliadora Bravo, presidenta de la Junta Cívica, expresó que se han unido a una lucha que es de todos, que no tiene banderas políticas, sólo la de la defensa de la salud.
Los habitantes de barrios y parroquias de Chone, se concentrarán desde las 16h00 en el Parque de las Madres, desde ahí marcharán por la calle Páez, Atahualpa y Bolívar, y terminarán en el Parque Sucre, donde se leerá el manifiesto de Chone a las autoridades nacionales, dirigido al Presidente de la República y la Ministra de Salud.
El alcalde de Chone, Deyton Alcívar; expresó “Estamos apoyando el reclamo de la población, yo soy médico y sé las implicaciones que tiene para todos, la falta de un hospital que no solo le sirve a Chone sino a los cantones aledaños, hemos confiado en lo que nos han dicho desde el poder central, pero la dilatoria nos obliga a decir presente, si esta vez se cumple la promesa de que el 24 de julio se firma el contrato, pues habremos marchado por la alegría de ver iniciados los trabajos”