Nadie se explica cómo un hijo podría ponerle fin a la vida de su propia madre. Los moradores del barrio Santa Marianita en Huachi, en Ambato (Tungurahua), se encuentran consternados ante la muerte de Gloria Acosta, de 52 años.
El cuerpo, con varios golpes en la cabeza, fue hallado sin vida rodeado de un charco de sangre. De este horrendo crimen, el principal sospechoso es su hijo, Patricio M. de 22 años.
De acuerdo con las primeras investigaciones, la noche del martes, el joven llegó borracho hasta la casa de su madre para reclamar un celular, que horas antes ya la familia había entregado a la pareja del hombre. Luego de discutir, salió y su madre detrás de él.
El cadáver fue hallado por moradores, que dieron aviso a las autoridades. De acuerdo con José Luis Garcés, comandante de la Zona 3, al inicio se comunicó al ECU 911 de un posible siniestro de tránsito.
«Nos informaron de un accidente, en una vía de tercer orden, cuando el personal llegó y revisó la escena se constató que se trataba de una muerte violenta«, informó en rueda de prensa, la mañana de este miércoles 12 de octubre de 2022.
Personal de Dinased, Criminalística y Fiscalía de Tungurahua realizaron el levantamiento del cadáver para luego trasladarlo hasta el centro forense.
Junto al cadáver encontraron dos piedras manchadas de sangre; se cree que estas serían el arma homicida, por lo que fueron fijadas y con varios indicios, como prendas de vestir del sospechoso, fueron puestas en cadena de custodia e ingresadas a la Policía Judicial para realizar varias pericias.
El presunto culpable fue encontrado escondido entre los matorrales cerca de donde se encontró el cuerpo. «Inmediatamente el personal junto a moradores empezamos a buscar al notar movimiento en el terreno frente al lugar donde se encontró el cuerpo, intentó huir, pero fue neutralizado«, indicó Viviana Tapia, jefa subrogante de Dinased Tungurahua.
El hombre fue detenido en flagrancia, los moradores estaban con los ánimos exacerbados, luego fue llevado hasta el Centro de Detención Provisional a la espera de la audiencia respectiva en el certificado emitido por el Centro de Salud se corroboró el estado de embriaguez.
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