La angustia de no saber nada de su paradero terminó para la familia de Jessica Yadira Narváez, de 28 años.
El cadáver de la mujer fue hallado mutilado y sepultado en el patio de la vivienda en la que vivía con su pareja. Esto en las calles 10 de Agosto y Eugenio Espejo, en Ibarra, provincia de Imbabura.
Se desconocía su paradero desde el pasado 9 de julio y la noche de ayer se hallaron sus restos.
Varios vecinos ingresaron a la vivienda y se percataron que en una parte del patio había tierra floja y removida por lo que al excavar algo más de un metro hallaron una mano.
Se alertó del hecho a la Policía y de a poco se fueron hallando otras partes del cuerpo de la mujer.
A los moradores se les hizo raro también que una noche varios desconocidos sacaron todas las pertenencias de la vivienda.
El principal sospechoso de este crimen es el conviviente de Jessica a quien los vecinos catalogaron como una persona problemática y que constantemente peleaba con ella.
Ellos sostuvieron ante la Policía que las peleas entre la pareja eran constantes desde que se mudaron a vivir al barrio La Primavera, ciudad de Ibarra. La víctima deja un hijo menor de edad en la orfandad. (MP Noticias)
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