El Gobierno español aprobó este viernes 22 de marzo del 2019 una nueva norma con el objetivo de reducir los tiempos de tramitación para las adopciones internacionales y dar más seguridad jurídica a los menores y a las familias adoptantes.
El nuevo reglamento intenta corregir los «farragosos y largos trámites» de este tipo de adopciones, según dijo la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
La nueva regulación contempla la creación de un registro nacional único de los organismos acreditados que hacen de intermediarios entre los países de origen de los menores y las familias en España y además, les permite a éstas elegir organismo.
Además, un único organismo, dependiente del ministerio que dirige Carcedo, será el que iniciará, suspenderá o paralizará la tramitación de las adopciones con los países de origen de los menores.
La administración determinará el número de expedientes nuevos que pueden tramitarse con cada país, con el fin de evitar acumulaciones y poder adecuar las necesidades de los menores a los ofrecimientos de las familias adoptantes.
En España hay actualmente en torno a 33 000 familias adoptantes en espera, según datos que se barajaron en un debate parlamentario del pasado mes de septiembre.
En la tramitación de las adopciones intervendrán además el Ministerio de Asuntos Exteriores y los gobiernos regionales, que son los que tienen las competencias de asuntos sociales en España. (El Comercio)