Los familiares del equipo de prensa del diario El Comercio secuestrado en la frontera entre Ecuador y Colombia y posteriormente asesinado pidieron este martes que las autoridades aclaren las nuevas revelaciones periodísticas que han aparecido los últimos meses, en el primer aniversario de ese suceso.
Yadira Aguagallo y Ricardo Rivas, novia y hermano respectivamente del fotógrafo Paúl Rivas, denunciaron en una rueda de prensa en la capital que lo aparecido en el libro «Rehenes», publicado este año por dos periodistas de investigación, desmiente muchas de las afirmaciones del Gobierno de Ecuador estos doce meses.
Por un lado, ese libro confirmó una información del diario El Tiempo de Colombia según la cual el 28 de marzo el Gobierno ecuatoriano trató de rescatar a los periodistas mediante sus fuerzas armadas.
Por otro, esa investigación probó, con base en una concatenación de hechos, que los tres fueron asesinados por sus captores el sábado 7 de abril, a pesar de que el Gobierno solo confirmó esa circunstancia casi una semana después.
Acusó al Gobierno de callar y «comprar el silencio», y aseguró que no iban a permitir eso porque es necesario «cicatrizar» las heridas del asesinato de sus familiares «con la verdad» por delante. «Creo que les tienen ordenado que callen porque si no arman un lío más grande porque no tienen forma de responder todas esas irresponsabilidades y mentiras que han venido diciendo», criticó.
Paúl Rivas, Efraín Segarra (conductor) y Javier Ortega (redactor) viajaron al norte hace un año para dar seguimiento a la deteriorada situación en la frontera con Colombia, donde operaban, y aún operan, grupos narcotraficantes.
Tras pasar un control de seguridad ecuatoriano y llegar a Mataje, fueron capturados y trasladados a territorio colombiano por el Frente Oliver Sinisterra, disidencia de las FARC bajo el mando de un hasta entonces desconocido alias «Guacho», abatido ocho meses después.
Por su parte, la pareja del fotógrafo comentó que la Fiscalía General del Estado (FGE) pidió en los últimos días nuevas versiones a personas que son «importantes» para las indagaciones y que esperan, en ese sentido, que la agilidad que parece demostrar la institución «apunte a más líneas de investigación» que no sean solamente que el equipo se puso a sí mismo en peligro.
Aguagallo confirmó que, tras el audio filtrado del presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, en el que decía que la vida de tres personas no valía la dignidad del Estado, lo único que recibieron fue lo mismo que el Gobierno envió al resto de medios de comunicación.
También mostró su preocupación por la situación en la frontera norte, donde este domingo hubo disturbios en algunos colegios electorales. «Yo no sé si existe alguna vinculación entre los hechos del proceso electoral y la presencia de estos grupos en la zona de frontera, pero sí estoy segura que las soluciones de la frontera tienen que ser integrales, no solo la militarización», indicó.