Galápagos prohíbe la pirotecnia desde este 28 de diciembre del 2018

El pleno del Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos aprobó este 28 de diciembre del 2018 una resolución que prohíbe la pirotecnia en las ‘islas encantadas’.

Quedan exentos de esta prohibición los juegos pirotécnicos que producen fenómenos luminosos de forma insonora.

Con el fin de proteger a la población y a las especies que habitan en las islas Galápagos, el Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos puso este 28 de diciembre del 2018 a consideración del Pleno del Consejo de Gobierno la moción de una provincia libre de pirotecnia.

Para ello, se buscaba prohibir la comercialización, tenencia, transporte y uso de cualquier tipo de fuegos artificiales. La moción  fue aprobada antes del mediodía.

En su cuenta de Twitter, la Ministra-Presidenta del Consejo de Gobierno de Galápagos, Lorena Tapia, calificó de «histórica» la resolución de prohibición de la pirotecnia en Galápagos. «Este es un regalo para el Ecuador y el mundo por la conservación», afirma.

En el 2017 se inició en Galápagos una campaña que buscaba desestimular el uso de la pirotecnia en las islas. La iniciativa Galápagos sin pirotecnia indicaba que los animales sufren de taquicardia, temblores, falta de aire, aturdimiento y miedo a la muerte como consecuencia de los fuegos artificiales.

La iniciativa de buscar la prohibición de la pirotecnia en las islas Galápagos también apunta a los efectos contaminantes del uso de la misma. Los colores de la pirotecnia «surgen de compuestos metálicos como el bario o el aluminio que pueden tener impacto negativo en la salud humana y animal», dice el Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos.

Además, «muchos pirotécnicos usados generalmente en las celebraciones por Navidad y Fin de Año contienen oxidantes conocidos como percloratos, los cuales activan el oxígeno necesario para la explosión». Estos componentes, según la propuesta, «se disuelven en el agua, contaminando ríos, lagos y el agua potable».

Todo esto sin tomar en cuenta que los fuegos artificiales liberan nubes de humo que afectan la calidad del aire local. En ciudades como Nueva Delhi, la fiesta religiosa de las luces conocida como Diwali causa altos niveles de contaminación por el uso de petardos.

Personas con trastorno del especto autista también pueden verse afectadas por los fuertes estruendos de la pirotecnia. Esto porque poseen una alta sensibilidad auditiva. Adicionalmente, el Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos hizo hincapié en los casos de accidentes y quemaduras por el uso de pirotecnia.

«Cada diciembre aumenta el número de niños que sufre quemaduras por jugar con pirotecnia».  La pirotecnia afecta «ecosistemas tan sensibles como las islas Galápagos». Principalmente «por su fauna única en el planeta y altamente protegida por el Estado Ecuatoriano», dice el Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos. (El Comercio)

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