Gobierno y grupos sociales se reúnen hoy en su segundo intento por salir de la crisis nacional

La salida a la crisis que vive el país se abordó en dos escenarios, ayer (27 de junio). Por un lado, los dirigentes de las organizaciones sociales y el Gobierno se lograron sentar frente a frente para dialogar.

La segunda instancia sigue siendo la Asamblea, en donde continuaron los acercamientos para alcanzar los 92 votos que se requieren para destituir al presidente Guillermo Lasso.

Después de 15 días de manifestaciones, finalmente el Gobierno, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la Feine y Fenocín, empezaron a negociar. Sin embargo, una vez puestos los términos, los delegados del Ejecutivo hicieron las consultas respectivas a Carondelet, pero no regresaron. Daba la sensación de que los pedidos de la Conaie eran demasiado altos y no tenían un atisbo de concesiones por su parte.

Los 40 centavos

Las organizaciones indígenas propusieron que los combustibles bajen su precio en 40 centavos. El líder de la Conaie, Leonidas Iza, señaló que hay un malestar generalizado respecto a los USD 0,10 centavos de reducción que se estableció mediante decreto el domingo pasado. Por eso pidió que se consulte con el Presidente sobre ese pedido. Iza dijo que se mantendrán el tiempo necesario en Quito (“una semana, dos, un mes…”) y que harán marchas pacíficas.

El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, explicó que el incremento en el bono de desarrollo, la reducción en el costo de la urea, duplicar el presupuesto para la educación intercultural, condonación de deudas y emergencia en salud, así como la reducción de los 0,10 centavos en el costo de los combustibles significan un gasto de USD 805 millones al año para el Estado.

Jiménez dijo que el Ejecutivo había dado paso y acciones, que era hora de que la Conaie termine las movilizaciones. Ese punto ni se trató, solo sus exigencias estaban en la palestra.

El consejero político del Presidente, Diego Ordóñez, le dijo a EL COMERCIO que hasta el mediodía de ayer, una nueva reducción no estaba en análisis.

Sobre los otros puntos

Las organizaciones indígenas insistieron en la necesidad de la moratoria en las deudas en el sistema financiero. También sobre los precios de sustentación de productos para que producirlos no cueste más que venderlos.

Iza pidió la derogatoria de los Decretos Ejecutivos 95 y 151. El primero hace referencia a la Política de Hidrocarburos a través del Plan de Acción Inmediata para el desarrollo del sector para los próximos cien días.

El segundo tiene que ver con un Plan de acción del sector minero, también para 100 días. En este se busca, entre otros temas, desarrollar una minería eficiente, responsable, que implemente las mejores prácticas en lo ambiental y social.
Jiménez planteó que el Gobierno tiene una propuesta lista en lo que tiene que ver con la moratoria. No la presentó y la ofreció para el segundo encuentro.

También habló de tener un instructivo para la consulta libre e informada respecto a la minería. Además, anunció que se contemplan reformas a decretos relacionados con el sector minero.

Hasta el cierre de la edición, el panorama en la Asamblea

Hasta el momento, la situación en el Legislativo no ha variado en relación al domingo en la noche cuando se suspendió por segunda ocasión el debate sobre el pedido de Unes (correísmo). Ese movimiento junto a Pachakutik (PK), quien ayer insistió nuevamente en que votaría por la destitución, suman 72 votos.

A ellos se pudieran sumar independientes como es el caso de los disidentes de la Izquierda Democrática (ID). Sin embargo, con ese apoyo llegarían máximo a los 79 votos.

Salvador Quishpe, jefe de bloque de PK, ratificó que votarán por la destitución. Esto porque el pueblo quiere la salida de Lasso. Añadió que estarán atentos de cómo vote el Partido Social Cristiano (PSC), ya que ha votado junto con el correísmo.

El PSC, en comunicado firmado por Alfredo Serrano, presidente nacional, arremetió en contra del correísmo. Al final dijo que no apoyará la moción de destitución por no contar las razones que se establecen en la Constitución.

Marlon Cadena, jefe de bloque de la ID, dijo que los 10 asambleístas de su bancada, que son parte orgánica del partido, no darán sus votos. No asegura qué pasará con sus seis disidentes. Pero apuntó que, por sus posturas en el debate, se pudiera pensar que votarán en contra.

Sobre los disidentes de la ID, Cadena dijo que no han tenido conversaciones. Pero recalcó que por las intervenciones que se dieron el domingo pasado, él cree que también votarán en contra.

Juan Cristóbal Lloret, de UNES, dijo que las posiciones ya están planteadas. Señaló que más allá de la destitución, lo que interesa es lo que pasará el día después de que se consigan o no los votos. Para él, será necesario un proceso de diálogo y acuerdo con diferentes sectores.

Según Lloret, aunque no se logren los votos, el mecanismo permitió que la discusión pase del enfrentamiento en las calles a lo institucional y que se derogue el estado de excepción.

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