Un joven de 23 años ha sobrevivido después de recibir el impacto de una bala en la cabeza en su casa de Buenos Aires (Argentina) y permanecer durante ocho meses con la bala dentro, muy cerca del cerebro, sin que los médicos se dieran cuenta.
Según cuenta Clarín, Leonardo Oyola sintió un golpe fuerte e inesperado en la cabeza en julio de 2018, cuando se encontraba en el jardín de su casa. Al dirigirse al Hospital Durand, los médicos le examinaron con las manos la cabeza pero no encontraron explicación a sus fuertes dolores.
«Confíe en el médico, nunca viví algo así por lo que no supe manejarme», explicó el chico, que llegó a pensar que se podría haber debido al impacto de una piedra. Sin embargo, el dolor persistió y empeoró, con «jaquecas cada vez más frecuentes». «Cuando me tocaba la zona afectada, me dolía muchísimo», relató.
Ocho meses después, cuando el dolor se convirtió en «insoportable», Oyola volvió al Hospital Durand. En esta segunda consulta le realizaron una radiografía que resolvió todas las dudas: tenía una bala metida en su cabeza.
Inmediatamente los médicos ordenaron una intervención de urgencia para extraer el proyectil. «No podían creer que hubiera sobrevivido todo este tiempo con una bala alojada en mi cabeza», explicó Oyola. (20 Minutos)