El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, anunció este lunes 7 de enero del 2019 que abandonará su cargo después de más de seis años en la institución.
A través de un comunicado emitido desde Washington, Kim señaló: «Ha sido un gran honor servir como presidente de esta notable institución, llena de personas apasionadas dedicadas a la misión de acabar con la pobreza extrema en nuestra vida». Kim, de origen Surcoreano, nació en diciembre de 1959 y también tiene nacionalidad americana.
En su carta de despedida señaló que el trabajo Banco Mundial “es más importante ahora que nunca, ya que las aspiraciones de los pobres aumentan en todo el mundo y los problemas como el cambio climático, las pandemias, el hambre y los refugiados continúan creciendo tanto en su escala como en su complejidad.
Servir como presidente y ayudar a posicionar a la institución directamente en medio de todos estos desafíos ha sido un gran privilegio».
Cuando Kim llegó a la institución, en el 2012, estableció dos objetivos: acabar con la pobreza extrema para el 2030 e impulsar la prosperidad compartida, centrándose en el 40% de la población de menores ingresos en los países en desarrollo.
En abril de 2018, los gobernadores del Banco Mundial aprobaron un aumento de capital histórico de USD 13 000 millones para el BIRF y la CFI, que permitirá a la entidad ayudar a los países a alcanzar sus objetivos de desarrollo mientras responden a crisis como el cambio climático, las pandemias, la fragilidad y la falta de inversión en capital humano en todo el mundo.
Al reconocer el poder de los mercados de capital para transformar la financiación para el desarrollo, el Banco Mundial también lanzó varios instrumentos financieros nuevos, que incluyen instalaciones para atender las necesidades de infraestructura, prevenir pandemias y ayudar a millones de personas desplazadas de sus hogares por las crisis climáticas, conflictos y violencia.
El Banco también está trabajando con las Naciones Unidas y las principales compañías de tecnología para implementar el Mecanismo de Acción contra el Hambre, para detectar con anticipación las señales de advertencia y prevenir las hambrunas antes de que comiencen.
Una de las mayores necesidades en el mundo en desarrollo es la financiación de infraestructura para el desarrollo, por lo que el Banco Mundial comenzó a trabajar con un nuevo grupo de socios del sector privado.
De hecho, Kim anunció que se unirá a una empresa para aumentar las inversiones en infraestructura en los países en desarrollo. Los detalles de esta nueva posición serán anunciados en los próximos días.
También dijo que volverá a unirse a la junta de Partners In Health (PIH), una organización que cofundó hace más de 30 años. Kristalina Georgieva, CEO del Banco Mundial, asumirá el rol de Presidenta interina a partir del 1 de febrero. (El Comercio)