El golpe ahogó el grito. Durante tres segundos el cerebro de María Fernanda se desconectó. Sus músculos no reaccionaban, sintió que su sangre se congeló. El sonido del choque la ensordeció. Cuando se repuso del aturdimiento, supo que otro vehículo se estrelló contra la puerta derecha.
El accidente se produjo la semana pasada en Chillogallo, en el sur de Quito. Ella resultó con heridas leves. El otro conductor involucrado la acompañó hasta que llegó la ambulancia para atenderla.
Hasta julio de este año se han registrado 14 111 accidentes de tránsito en el país, que dejaron 1 195 muertos y 11 231 lesionados. Las provincias con mayor número de siniestros son Guayas, Pichincha y Manabí.
La ciudad con mayor número de muertes por accidentes de tránsito registrados en el país es Quito. En el 2018 murieron 255 personas, según la Agencia Nacional de Tránsito (ANT). Esta entidad maneja las estadísticas de los siniestros reportados en las vías.
Corazones azules en las vías, cruces de piedra en los parterres, flores artificiales en los puntos donde se produjeron los choques son evidencias de que ahí murieron padres, madres o seres queridos. Ahí terminaron vidas.
Según las estadísticas de la entidad, el número de accidentes ha disminuido en relación con el 2018. Por ejemplo, en los primeros siete meses del año anterior hubo 25 530 siniestros y se registraron 2 151 muertos.
En la capital, la av. Simón Bolívar es considerada la vía con más accidentes fatales. La Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) detectó 11 puntos proclives a siniestros en esta arteria de 51,7 kilómetros de extensión. En esos puntos se destacan sectores como El Troje, La Argelia, Loma de Puengasí, las cercanías a la Universidad Internacional, el Puente de Guápulo y Zámbiza.
Para María Fernanda, esta vía es sinónimo de muerte. Ella utiliza esta avenida todas las mañanas (incluso ahora que no tiene el carro debido al choque), para llegar a su trabajo cerca de la Embajada americana, en el norte. Ahí ha visto choques, vehículos volcados, automóviles reducidos a un montón de fierros deformes.
Ayer 13 de septiembre del 2019 a las 12:00, un tráiler que circulaba en sentido sur-norte en esa avenida sufrió un accidente a la altura del desvío a la autopista General Rumiñahui.
El contenedor que transportaba se cayó al desengancharse. El vehículo pesado perdió pista y la plataforma que llevaba impactó contra el parterre.
Otro percance ocurrió entre las avenidas Mariana de Jesús y Mariscal Sucre, y uno más en el sector de la Galo Plaza Lasso y Eloy Alfaro, en el que se atendió a dos personas heridas.
El 6 de septiembre último, una madre de familia murió luego de que el auto en que viajaba fuera embestido por un tanquero. Ayer 13 de septiembre del 2019 se realizó la reconstrucción de los hechos. En la diligencia estuvo el causante del accidente acompañado de su abogado, Gustavo Pazuña.
La defensa señaló que el conductor corrió a una peña para botar tierra a los vehículos y evitar un posible incendio. La versión es la misma que mencionó el conductor en un parte de la AMT, dirigido a la Fiscalía de Flagrancias de Tránsito, el día del accidente. En el documento, el chofer señaló que salió “corriendo porque el carro estaba prendido y como llevo combustible, traté de botar tierra para evitar un mayor problema. Yo traté de ayudar”.
Añadió haber perdido los frenos y que tuvo que cambiar de sentido de circulación, ya que había carros detenidos. “A lo que cruzo, me topo con un carro y lo llevo hacia la peña”.
En un video del día del accidente se observó al hombre salir por una ventana del tanquero y subir una pared de tierra.
Luego, la Policía informó que había sido detenido. El conductor tendría 50 citaciones de tránsito. Entre las infracciones están desobediencia a agentes de tránsito, neumáticos en mal estado, no uso del cinturón de seguridad, vehículo sin placa y mal estacionamiento. Ahora, él es procesado por muerte culposa y cumple con prisión preventiva. Según el Código Penal (art. 377), el delito es sancionado con cárcel de hasta cinco años y la suspensión de la licencia por seis meses.
Parientes de la madre fallecida y que estuvieron en las pericias de ayer, no se explican cómo alguien con 50 citaciones seguía conduciendo. Tampoco entienden cómo una persona intentó huir en lugar de socorrer a la víctima. El esposo de la mujer creó el ‘hashtag’ #JusticiaCuikaSalvador para exigir justicia en este caso.
María Fernanda dice que en su caso fue una suerte que la persona que causó el accidente la auxiliara. Espera reformas legales para endurecer las sanciones a los responsables. (El Comercio)