El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, respondió a la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) sobre la posible demanda al gobierno ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por «uso excesivo de la fuerza y crímenes de lesa humanidad» en las protestas de octubre pasado.
El mandatario, mediante una cadena nacional, aseguró que Ecuador está indignado por esa intención de parte «de quienes atentaron contra la seguridad de los ecuatorianos y en contra de la democracia».
Además, Moreno dio cifras sobre todo lo que dejaron las manifestaciones violentas durante el paro nacional de 11 días.
«435 policía y 80 militares fueron heridos, un policía perdió su ojo, 202 policías y militares fueron secuestrados y amenazados de muerte. Otros fueron obligados a despojarse de sus zapatos y caminar sobre vidrios, o ser rociados con gasolina», afirmó.
«255 militares fueron retenidos, 26 UPC fueron destuidas, 1 UVC quemada, 108 vehículos policiales fueron afectados y 131 periodistas agredidos», complementó.
El Jefe de Estado, que habló durante 8 minutos, aseguró que el pueblo ecuatoriano sabe quien está por la paz y quienes son los que generan violencia. También enfatizó que defenderán la paz y el trabajo que realizó la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas que no dispararon ni una bala.
Para Moreno esto solo es parte de una maniobra de personas que «tienen intereses electorales».
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