Una cadena nacional del presidente Lenín Moreno en la que denunció la «desfachatez de los corruptos que están siendo investigados», pareció ser más bien una respuesta a la intervención en video que realizó el martes el prófugo exsecretario de Comunicación, Fernando Alvarado.
Sin dar nombres, el primer mandatario dijo que «después que abusaron de la buena fe de los ecuatorianos (…), después que amasaron fortunas ilícitamente hoy quieren impunidad. Hoy quieren que no se les juzgue, aduciendo persecución política», aludiendo así a su excompañero de gabinete en el régimen de Rafael Correa.
Insistió en el tema de lucha contra la corrupción, por lo que recordó que el pasado lunes se reunió con todas las funciones del estado con quienes conformó una mesa interinstitucional de lucha contra esos actos.
«Nadie puede burlar la justicia, menos aún un sospechoso de corrupción. Vamos a dar lucha sin tregua para extraditar a los culpables o sospechosos que han salido del país, o apresarlos si todavía están aquí», dando así al parecer un espaldarazo a la declaración del Secretario de Comunicación Andrés Michelena, que esta semana dijo que pedirán también a la justicia que tramite la prohibición de salida del país de 31 exfuncionarios del régimen de Rafael Correa, investigados por algunos delitos.
«La fuga de un sospechoso demuestra que se siente culpable. La gente suele decir, a confesión de parte, relevo de prueba. Eso demuestra que vamos por la senda correcta», señaló Lenín Moreno.
«Como jefe del Estado ecuatoriano y también como ciudadano, exhorto a las funciones del Estado a actuar con rapidez, actuar con eficacia, respondiendo a la urgencia que tiene el pueblo ecuatoriano de ver que se hace justicia». Finalizó su intervención con un llamado a la unidad, honestidad y contra la impunidad.
Este mismo miércoles, a cuatro días de su fuga, la jueza Silvia Sánchez pidió para Fernando Alvarado la prisión preventiva, prohibición de enajenación de bienes, inmovilización de cuentas y oficializar a la Interpol para que emita difusión roja para su ubicación y su captura con fines de extradición. Se desconoce el país en el que se encuentra, información que según el defensor de Alvarado será conocida en pocos días. (El Universo)