Un caso de abuso sexual en una escuela de Quito se suscitó hace tres años. Una niña de siete años le confesó a su madre, que el chofer del bus de la menor, que le hacía el recorrido en la escuela donde estudiaba le tocó sus partes íntimas. En una entrevista para Teleamazonas, «María» (nombre protegido) quiere evidenciar las indolencias de las autoridades en los planteles educativos.
«Mi hija me dijo, que el señor (se refería al chofer) me toca mis partes íntimas, yo le pregunté a quien se refería y me dijo el chofer del recorrido de la escuela», así señaló María en una entrevista para el canal Teleamazonas.
En un papel la menor le confesó a su madre el trauma que estaba viviendo. «Le metía la mano por debajo de la falda short, por debajo de su interior y le tocaba su vagina y también la nalga», confesó la madre de la menor.
Según «María» intentó poner la denuncia en la institución educativa y en el Distrito, pero no recibió respuesta. La escuela de Quito puso en duda la palabra de la menor y le comunicaron a la madre que el chofer era inocente.
La madre denuncia que cuando sucedió esta tragedia, la escuela no la ayudó. «La escuela debió, al haber alertado esta emergencia, haberme acompañado al siguiente día a poner la denuncia en la Fiscalía, pero al contrario me hicieron perder dos días», relató.
Luego de esto, la madre interpuso una denuncia en la Fiscalía y luego del respectivo procedimiento en la investigación y el proceso legal, el chofer del recorrido fue declarado culpable y lo sentenciaron a 9 años y cuatro meses de prisión.
La madre relató que el hombre apeló a la Corte Provincial de Pichincha esta sentencia y solicita que nieguen esta apelación porque no hay argumentos.
«María» denunció que la escuela de Quito no siguió con los protocolos correspondientes cuando se presentan este tipo de casos de abuso sexual por ‘cuidar el buen nombre de la institución’. (Metro)