El primer secador de maíz con paneles solares se habilitó en la ciudadela El Florón, a 10 kilómetros al sur de Portoviejo.
Esta iniciativa se dio dentro del proyecto Tejiendo Redes, financiado por la Unión Europea (UE), y surgió tras el terremoto del 16 de abril de 2016. El proyecto fue asignado a la Asociación Agropecuaria Sabanas de El Florón, que acoge a 500 familias de este sector.
Víctor Palma, socio de esta asociación productiva manabita, indicó que técnicos de la organización no gubernamental italiana Avsi –que coordina este trabajo de la UE– se propusieron dar un impulso a los agricultores de esta zona, quienes en su mayoría sufrieron los estragos del sismo.
El proceso de capacitación fue arduo, dice Palma, pero los socios coincidieron en que tendrán una mejor producción de maíz con esta secadora.
“Ahora de una manera organizada podrán vender un producto final con un precio mejor, ya que anteriormente vendían un quintal en once o doce dólares, pues tenía una humedad de 19 %, pero con esta secadora se puede tener un producto terminado con 13 % de humedad”, indicó Palma.
Urresta agregó que esta secadora tiene la capacidad de bajar la humedad del maíz entre 7 y 10 puntos porcentuales y la planta posee ocho colectores solares esparcidos en 20 metros con una potencia de entre 5 y 6 kilovatios de energía por hora, en un equipo que tiene una vida útil de unos quince años.“A eso hay que sumarle la energía que entra al invernadero que son unos 10 kilovatios, que es la relación directa que entra del sol al invernadero, es sumada más la radiación que entra por colectores solares a través de un ventilador”, destacó Urresta. (I)