Alcantarillado colapsado debido a la cantidad de lluvia caída, taponamientos de ese sistema y en algunos casos la ausencia de este servicio básico han generado que en las provincias de Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas 65 familias hayan sufrido afectaciones en sus viviendas.
De los 24 cantones que comprenden ambas provincias, los que mayor número de familias afectadas por anegaciones momentáneas registran son Manta, en Manabí, con 46, y La Concordia, de Santo Domingo de los Tsáchilas, con 7, según Julio Celorio, coordinador zonal 4 del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE).
A más de las siete familias afectadas en La Concordia, otra más se identificó en el cantón de Santo Domingo. En Manabí, aparte de Manta, seis familias fueron afectadas en Portoviejo, dos en Chone, otra en el cantón Flavio Alfaro. En el resto de cantones manabitas ha habido incidentes viales o de aguas estancadas que no generaron mayores problemas.
“Tenemos 57 familias (en Manabí) que han sido afectadas por motivos similares al ingreso de agua a la vivienda, por temas de alcantarillado principalmente. No hemos tenido afectación por el momento por desbordamiento de ríos o de quebrada como tal y en ese sentido la mayor afectación se ha registrado en el cantón Manta”, declaró Celorio.
En el caso de la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, el punto crítico más relevante se da en Alluriquín, pero no se han tenido problemas severos pese a ser considerada una zona de riesgo, sin embargo, en el sector rural, sobre todo en las parroquias Valle Hermoso y Santa María del Toachi, sí han existido problemas de vialidad.
En el caso de Manta la lluvia que más inconvenientes causó fue la de la noche del pasado 2 de marzo, cuando la municipalidad intervino en sectores como La Pradera, Elegolé, Abdón Calderón, Cancha Tres Reyes, parte central de la parroquia Los Esteros, al igual que en el centro de esta urbe.
Emilio Macías, coordinador municipal general, declaró que los sistemas pluviales que se encuentran en ejecución aún no están operativos porque falta que se conecten a los ramales principales.
“En el momento que se culmine se acabarán estos problemas de inundaciones”, declaró Macías, quien agregó que tras esa fuerte lluvia se limpiaron los sumideros que estaban llenos de basura, lo que en algunos casos provocó el taponamiento de los sistemas e inundaciones en varios sectores de Manta.